Bloqueo en el Amor//Tsukishima y tú.

Introducción

Jamás olvidaría el sentimiento tan desagradable que experimenté al estar en una relación desastrosa, solo quería huir de ahí, de Tokio, mudarme a otra parte del país que no me hiciera recordar como me sentía en todo ese proceso de superación.

Estaba consciente de que no todo podía ser perfecto, eso siempre me lo habían dicho mis mejores amigos que me apoyaron como nunca, pero tenía un miedo enorme de salir, de encontrármelo y de que volviera a recordarlo, era vomitivo y a veces solo pensaba en como pude permitirle tantas cosas.

Me sentía insegura, me volví pasivo-agresiva con las personas que no conocía a modo de defensa, evitaba a toda costa volver a sentirme como me sentí esa vez.

Había veces en las que me la pasaba llorando por su culpa, sentía que el corazón aún no había sanado, aunque iba mejorando.

Sentirme una tonta tampoco era lo mejor, pero aprendí a que a veces está bien no estar bien, siempre tenía a Kuroo y Kenma que podían estar cuando los necesitaba y no todo estaba perdido.

Y como si alguien poderoso hubiese escuchado mis suplicas y pensamientos, antes de iniciar clases, me mudaría a Miyagi, lejos de Tokio, lejos de todo lo que me había lastimado, pero eso implicaba también alejarme de mis amigos, aunque estaba dispuesta a hacerlo con tal de tener un solo respiro, con eso me bastaba. Además, estaría rodeada de naturaleza, una vida pueblerina tampoco sonaba tan mal y justo iniciaríamos clases, lo que significaba conocer a personas nuevas que no conocieran mi pasado y eso era bueno.

—¿Segura que estarás bien? —preguntó el pelinegro.

—Sí, segura que estaré bien, tú no te preocupes por mí, preocúpate por estar en las nacionales —él negó mientras me abrazaba.

—No es una despedida, Kuroo —Kenma sonaba seguro y eso era raro de su parte—, ¿verdad, ______?

—Claro que no, todo estará bien, se los prometo.

—Te vamos a extrañar —aunque dijera que no era una despedida, sí sonaba como una y eso ya daba miedo.

—Y yo a ustedes, pero prometo que estaré en contacto todos los días —sonreí desde lo más profundo de mi alma y suspiré—. Ya, ya, nada de llorar hoy, saben que esto me hará bien.

—Lo sabemos.

Los abracé a los dos sintiendo como esa ______ se liberaba de todo lo que le había pasado, dejándola en Tokio y tratando de que no me persiguiera y aunque sabía que eso era muy imposible porque gracias a ella pude crecer, también sabía que en Miyagi no me iba a servir de nada.

Después del abrazo, agité mi mano y subí al carro de mi padre miré la ventana y esos dos estaban llorando y yo también empecé a llorar. Estar tanto tiempo juntos para que después nos separaran, no era lo más satisfactorio del mundo, pero así pasaba, a veces, tenías que dejar a algunas personas en algún lado para que conocieras a otras, pero no todo estaba mal, yo sabía que iría a visitarlos y estaríamos en contacto, solo que no como nosotros esperábamos.

Y en ese momento, rumbo a mi nuevo hogar, dejando Tokio atrás, quizás recordando viejos tiempos, puedo asegurar que una gran tristeza se había ido, me sentía aliviada y a la vez muy emocionada por todo lo que pasaría en el futuro no muy lejano y estaba lista para seguir adelante.

Y como lo prometido es deuda, aquí les traigo la introducción del fanfic de Tsukki. Y como hoy es cumpleaños de Hinata, quise hacer algo especial.

¿Qué tal les pareció el inicio?

Les doy una vez más la bienvenida a los nuevos o viejos lestores que me van a acompañar durante la publicación de esta historia, de verdad espero que disfruten de mi nuevo escrito y que se diviertan que sientan la emoción que yo voy queriendo que sientan.

Créditos de la portada a Yuly_001

Cuídense. <3