Capítulo 19

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Tuvimos que madrugar de nuevo para poder llegar a Tokio en el autobús de la escuela

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Tuvimos que madrugar de nuevo para poder llegar a Tokio en el autobús de la escuela. Yo como mánager me tocaba ir hasta enfrente con Shimizu y Yachi, mientras que Kei se iba con Yamaguchi, todos íbamos dormidos, menos los escandalosos que se despertaron para ver el Skytree, la real y sus gritos me habían despertado, estábamos por llegar por fin a la posada.

Primero dejaríamos el equipaje para después calentar en el gimnasio que usaríamos gracias al entrenador Nekomata.

—Nunca aprenden —dije negando al escuchar como Daichi les decía que no quería escándalo.

La posada a la que habíamos llegado era muy pequeña, pero parecía lo suficientemente grande para todos nosotros.

—Puedes colarte en mi cuarto cuando quieras —susurré en el oído de mi novio una vez nos contamos en un pequeño sofá.

— Necesitamos descansar —fue lo único que dijo para irse al cuarto de chicos.

Estuvimos acomodando nuestras cosas, para poder ir a entrenar al gimnasio. Yachi empezaba a ponerse muy nerviosa, al igual que Asahi que eran los más nerviosos.

Estuvieron varias horas entrenando mientras que las chicas nos dedicábamos a pasarles toallas o botellas de agua para que pudieran dar lo mejor. Al terminar de jugar, regresamos a la posada, yo me metí a bañar para amanecer fresca y descansar mejor, mientras que los chicos se fueron con el entrenador Ukai y e| profesor Takeda.

Shimizu parecía estar disfrutando del agua caliente al igual que yo, todo lo contrario, a Yachi, parecía algo nerviosa, añadiendo que no podía vernos sin ponerse roja.

—Este... —gritó la rubia de la nada haciendo que tanto la mayor como yo volteáramos a verla—. Sigues usando medias negras con el uniforme de verano, ¿verdad?

La pregunta claramente era para Shimizu.

—¿No te da calor? —Yachi tenía una buena duda, aunque yo nunca me había fijado en ese detalle— ¡Lo siento! ¡No debería criticar tu ropa!

La rubia quería escapar, pero la pelinegra la detuvo. Yo sólo me reí de la escena.

—Tengo muchas cicatrices en las piernas —comenzó Shimizu—. Empecé a usar medias para ocultarlas y ya me acostumbré.

—¿Cicatrices? —pregunté curiosa. Era la primera vez que contaba algo de ella.

—Estaba en el equipo de atletismo en carrera de obstáculos, me tropezaba muy seguido —explicó—. Tengo bien los brazos, pero tengo muchas marcas en las piernas. No soy tan valiente como tú, ______.

—Entonces, las dos tienen como medallas de honor — me sorprendió bastante lo que la rubia había mencionado.

Ambas nos empezamos a reír por las torpes palabras de Yachi.

— El equipo de secundaria era muy grande y no soy buena hablando con la gente — Shimizu parecía nostálgica—. No era muy cercana a nadie. E incluso al unirme al equipo de voleibol, no había otra asistente conmigo, son las primeras con las que puedo hablar así.

Bloqueo en el Amor//Tsukishima y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora