Francia, en la Mansión Blanctorche.
Elisabeth buscaba a Ash para darle una noticia que ella estaba segura que él no rechazaría, cuando por fin lo encontró se acercó a él pero se sorprendió y molestó con lo que Ash estaba viendo en su celular.
-¡Qué estas mirando Ash! - expresó Elisabeth con molestia.
Ash se asustó y volteó a mirar a Elisabeth.
-Nada Betty - dijo Ash y río con nerviosismo.
-¡No te hagas Ash! yo misma vi que estabas viendo a una señorita bailando en ropa interior, Acaso estas viendo... - Elisabeth decía y se calló cuando una idea sucia se le vino a la mente.
Ash sabía lo que Elisabeth estaba pensando y lo que le quería decir, así que decidió hablar y negarlo.
-No es lo que estás pensando - negó Ash.
-¡Entonces explícame eso! - expresó Elisabeth con autoridad y molestia, y señaló el celular de Ash.
Ash miró su celular y se dio cuenta de que el vídeo seguía en reproducción, abrió sus ojos con susto y lo pauso.
-Eso... una aplicación me lo recomendó - dijo Ash y río con nerviosismo.
-Pues con más razón dame eso - dijo Elisabeth y le quitó el celular a Ash.
-¡No! Betty es mío - dijo Ash e hizo un pequeño berrinche y quiso quitarle el celular a Elisabeth.
-¡Dije que no! - expresó Elisabeth con firmeza y le dio un leve manotazo en la mano de Ash -. Además si una aplicación anda recomendando estos tipos de contenidos sin el consentimiento de esta señorita, entonces debería de reportarlo - dijo ella con seriedad.
Elisabeth dio media vuelta para irse pero la voz de Ash la detuvo.
-¿Me devolverás el celular verdad? - preguntó Ash con curiosidad.
-No y ni se te ocurra insistirme - respondió Elisabeth mientras miraba seriamente a Ash.
Elisabeth se fue dejando solo a Ash.
-No fuiste tan lista Betty, pero sé en donde se encuentra esa señorita - pensó Ash y río divertido.
Nueva York, en el Local de Sakura.
Después de lo sucedido con Duo Lon, Isabella decidió esperar a su amiga Suki para que ella le ayude a poner el nuevo postre en el menú principal, su amiga es la más alta de las cinco amigas, así que decidió ir a atender a los dos jóvenes sentados ya que miró que su amiga Sakura no aparecía.
-¿Qué estará haciendo Sakura? - pensó Isabella.
Shen Woo y Duo Lon vieron que Isabella se acercaba a ellos, así que era hora de que comenzarán a poner en marcha su plan.
-Buenos días - saludó Isabella con una sonrisa.
-Buenos días - saludaron ambos al mismo tiempo.
-¿Qué van a ordenar? - preguntó Isabella.
Ambos le dieron sus pedidos.
-Esta bien, ahorita se los traigo, con permiso - dijo Isabella con una sonrisa.
Isabella se hiba a ir pero la voz de Shen la detuvo.
-¡Espere! - dijo Shen.
Isabella se detuvo y lo miró.
-Que se le ofrece - dijo Isabella con curiosidad.
-Sé que usted es amiga de las dos señoritas que estaban sentadas con usted aquella noche, verá pues a mi amigo y a mi nos llamaron mucho la atención y nos gustaría saber en donde las podríamos encontrar o tal vez como contactarlas, ¿Usted podría darnos esa información?, tal vez sus números telefónicos - dijo Shen mientras esperaba que su plan funcionara.
-Lo lamento pero esa información no se la puedo dar a unos desconocidos - comentó Isabella con cierta desconfianza.
-Tiene razón, que descortesia de nosotros, mi nombre es Shen Woo y mi amigo es... - Shen no terminó de hablar porque Duo lo interrumpió.
-Mi nombre es Duo Lon - habló Duo.
-Así es, ambos somos de China - dijo Shen y sonrió.
-Es un gusto conocerlos pero aún así no puedo darles esa información - dijo Isabella.
Shen estaba perdiendo la poca paciencia que tenía al ver que su plan no estaba funcionando, pero tuvo que calmarse si quería esa información para su amigo.
-Por favor señorita, solo queremos conocerlas más, conversar con ellas - dijo Shen en súplica.
Isabella no le pareció tan mal que quisieran conocerlas, pues a sus amigas también les gustaron estos jóvenes así que una cita no vendría mal.
-Esta bien, voy a ayudarlos, mis amigas mañana tienen el día libre - dijo Isabella con una sonrisa.
Shen al escuchar esas palabras de Isabella sonrió con felicidad de saber que su plan estaba funcionando.
-¿En donde podríamos verlas? - preguntó Shen con curiosidad.
-Aquí, es un buen lugar y con muy deliciosa comida - respondió Isabella.
A Shen no le pareció esa respuesta pero no tenía otra opción.
-Esta bien, muchas gracias - dijo Shen con una gran sonrisa.
Duo Lon solo se burlaba por dentro de solo ver como Shen estaba actuando.
-De nada, ahora si con permiso - dijo Isabella.
Isabella estaba por irse pero la voz de Shen la detuvo de nuevo.
-Por cierto, ¿Puedo tener tu número de teléfono? - preguntó Shen con curiosidad.
Isabella abrió sus ojos con sorpresa cuando escuchó esa pregunta.
-¿Por qué quiere mi número telefónico? - preguntó Isabella con curiosidad y desconfianza.
Duo Lon sabía a donde iba Shen con esa pregunta y no le pareció para nada.
Shen hiba a responder pero Duo Lon se lo impidió.
-Es para mi - habló Duo.
Shen se sorprendió con lo que su amigo dijo, no esperaba algo así, pero decidió ayudarlo cuando miró que Duo Lon no sabía que más decir.
-Así es señorita, es que mi amigo a pesar de que se ve amargado, aburrido, frío y con cara de pocos amigos, le gusta ligar con señoritas guapas, atractivas, sexys y sensuales así como usted, pero es tímido para pedir sus números telefónicos - comentó Shen y sonrió con nerviosismo.
Isabella abrió más sus ojos con sorpresa por lo que Shen dijo, sentía pena y vergüenza así que decidió evitar mirar a Duo Lon.
Duo Lon solo quería matar a Shen por las palabras que dijo, lo estaba dejando en mal.
-No puedo darle mi número de teléfono, y tampoco estoy interesada en tener citas, con permiso - dijo Isabella apenada y se retiró con prisa.
Cuando Isabella se retiró, Duo Lon decidió hablar.
-Pedirle su número de teléfono y dejarme en mal no estaba planeado - dijo Duo con molestia.
-Solo quería conocerla eso es todo, pero parece que no podremos, además te rechazo - dijo Shen y río.
-No me importa, solo deja de incomodarla y molestarla - dijo Duo con seriedad.
-Ayer te molestaste por lo que dije de su ropa interior, y ahora porque le pido su número de teléfono ¿Qué te pasa? ¿Por qué la proteges tanto?, mejor dime que te gustó y que la quieres solo para ti - comentó Shen con molestia por esa actitud de su amigo.
-No es eso, es solo que te conozco y sé muy bien tus intenciones, ella no es como las señoritas que sueles conocer - dijo Duo.
-¡Ya lo sé! - expresó Shen con molestia.
Ambos decidieron quedarse en silencio mientras esperaban sus pedidos de comida.
MiriamVirgo.