Y

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El miedo me inunda, ¿qué tal si de verdad me vió y me persiguió?

Los golpes son bastantes fuertes y me hace recordar cómo tocó la puerta con la misma fuerza para después golpearme. Lágrimas me inundan, mi corazón se acelera y la respiración comienza a a faltarme.

Por favor, vida, te pido que no sea él.

Tomo más agua y vuelvo a aventármela a la cara. Me miro nuevamente al espejo...verme perder brillo ha sido una de las cosas más tristes que he sentido.

-____, ¿estás ahí?- es Yaomomo de quién se trata

Abro la puerta y me ve sorprendida

-Estoy bien.- sonrío viéndola directamente

-No, no estás bien. Y eso está bien, sentirte así supongo que es parte del proceso que vivimos por estar con hombres así...- se acerca y me da un fuerte abrazo

Supongo que es eso lo que me hacía falta...

Suelto en llanto y la abrazo de vuelta sin querer soltarla. Quiero que nunca le pase nada a ella...

Voy a cuidarla como me sea posible.

Después de unos minutos de estar abrazadas, nos separamos y toma de mi mano.

-Ven, vamos a tomar un té.- me sonríe y yo le devuelvo la sonrisa, para salir a su jardín con las demás invitadas.

Nos sentamos junto a ellas mientras tomamos el té y una pequeña conversación trivial.

Hasta que de pronto, apareció nuevamente mi tormento.

Bakugo Katsuki

Estábamos a punto de salir de la habitación de billar cuando me habla Eijiro

-Señor Bakugo

-Dime

-Hanna...

____ Gray

-Parece que los hombres han terminado de jugar- dice una chica de pelo marrón y las demás asienten

Al voltear veo a Katsuki que se acerca a mí

No puedo evitar que mi cuerpo no tiemble al verlo.

-Tenemos que retirarnos- me dice al llegar a mi lado.

Asiento y únicamente me despido de Yaomomo.

Uno de los primeros pasos para ser odiada es no mostrar reverencia o respeto por alguna de las presentes.

Al llegar al lado de la pareja Todoroki, solo nos despedimos rápidamente y nos dirigimos al auto con el chofer.

-¿Puedo tomar el atrevimiento de preguntar porque no quisiste esperar un poco más con los chicos?

-Surgió un problema.- suelta serio

-¿En tu empresa o con tus padres?- pregunto algo angustiada al ver su enojo

-Con Hanna, le ha sucedido un accidente.

Esa mujer nuevamente...

Me quedo callada y tomo un poco más de separación entre él y yo.

"Los insultos de una mujer enojada no son absolutamente nada, en comparación a su silencio" Escuché decir a mi madre una vez y, desde entonces, creo que es lo mejor.

"Superficialidad" Katsuki Bakugou x tn Donde viven las historias. Descúbrelo ahora