capítulo 35

1.1K 158 21
                                    

~En los brazos del Villano~

Chisuzu miró sorprendida al hombre que tenía delante. No era un sueño, ni una ilusión: era William en carne y hueso. La incredulidad y la emoción se mezclaron en su rostro, y antes de poder controlarlas, las lágrimas brotaron con toda su fuerza, cayendo en cascada por sus mejillas. Había pasado tanto tiempo deseando este momento, y ahora que finalmente estaba aquí, la realidad la abrumaba.

Ignorando a su grupo, que seguía en estado de shock por el reciente enfrentamiento, Chisuzu comenzó a caminar hacia William. El ataque contra la Necroarácnida había drenado casi toda su energía, dejándola al borde del colapso. Sus piernas temblaban con cada paso, pero su determinación la mantenía en movimiento.

Cada paso hacia él se sentía como una eternidad, su cuerpo protestaba por el esfuerzo, pero su corazón y su mente estaban fijos en un único objetivo: llegar a William. Si pudiera, Chisuzu habría corrido hacia él, pero su cuerpo agotado no le permitía más que un lento avance. Mientras avanzaba, maldecía internamente su decisión de atacar a la Necroarácnida con su último y más poderoso ataque. Pero sabía que no había tenido otra opción; su miedo inhumano a las arañas la había impulsado a actuar de manera desesperada.

William, al verla tambalearse, se apresuró a su encuentro, sus ojos llenos de preocupación y desesperación. La distancia entre ellos se acortaba, pero para Chisuzu, cada paso se volvía más difícil. Sentía cómo su cuerpo se debilitaba cada vez más, pero la visión de William la mantenía en pie, dándole la fuerza necesaria para continuar.

Cuando finalmente estuvo lo suficientemente cerca, la sangre comenzó a brotar de su boca, una señal de la gravedad de sus heridas. Los ojos de William se abrieron de par en par, reflejando una mezcla de shock, miedo y pánico. Sin pensarlo dos veces, se apresuró a agarrar a Chisuzu, justo cuando ella caía hacia adelante, sus fuerzas agotadas.

Con sus últimas fuerzas, Chisuzu logró esbozar una sonrisa ganadora. A pesar del dolor y el agotamiento, una sensación de paz la envolvió al estar en los brazos de William. En ese momento, todos sus temores y preocupaciones se desvanecieron, reemplazados por una profunda sensación de seguridad y amor.

«Sin importar qué, el mejor lugar siempre será en tus brazos», pensó para sí misma mientras se dejaba llevar por la oscuridad, sabiendo que, al menos en ese instante, estaba a salvo. Los brazos de William, aunque firmes y protectores, temblaban ligeramente, reflejando su propio miedo y desesperación al ver a Chisuzu en tal estado.

William, con lágrimas en los ojos, sostuvo a Chisuzu con fuerza, tratando de transmitirle todo su amor y apoyo. Sabía que no podía perderla, no después de todo lo que había pasado. Mientras los demás del grupo comenzaban a reaccionar y a acercarse para ofrecer ayuda, William murmuró suavemente:

-No te preocupes, Chisuzu. Estás a salvo ahora. Prometo que te cuidaré- le prometio William en un suave susurro que solo ella podia oir. Aquel susurro mezclado con cariño y cuidado.

Chisuzu, aunque débil y a punto de perder el conocimiento, ya estaba pensado como hacer que William se haga cargo de sus palabras.

♡₊˚ 🦢・₊✧

-¡¿Chisuzu está bien?! - preguntaron a gritos Hiroshi y Hiroki, la desesperación y el pánico claramente reflejados en sus voces.

-¡Guarden silencio, estúpidos! ¿¡No ven que ella acaba de vomitar sangre!? - les gritó Hiroto, el mayor, mientras golpeaba a ambos en el estómago con la culata de su pistola. La violencia de su acción no solo fue un intento de callarlos, sino también una expresión de su propia angustia y desesperación por la situación.

Me convirtí en la novia del villanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora