Viva la música:

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Cassie todavía no había asimilado su actuación con cierto chico... Y no sabía qué hacer, no paraba de pensar en ello, en cómo cantaban...
Y su cabeza estaba en las nubes, tanto que cuando apareció Patroclo, él tuvo que subir el tono de su voz para que saliese de su mundo:

-Por fin -Patroclo suspiró-. ¿En qué pensabas si se puede saber? Has estado ensimismada unos minutos...

-Pues... -Cassie no sabía si debía contarlo, le daba vergüenza, bastante-. No sé, es sobre una canción que hemos cantado...

-Ah, me suena -él recordó-. Es la de Summer Nights, ¿verdad?

-¿Cómo lo sabes? Se supone que es secreto -preguntó Cassie nerviosa.

-Pues... Se corre la voz, ¿sabes? -contestó él-. Y supongo que a tí te ha tocado la chica...

-Sí -ella declaró.

-Pues genial entonces, tienes la voz ideal -él se alegró por ella.

Pero Cassie no estaba tan contenta de serlo. Bueno, por una parte sí, por supuesto, pero otra... se dejaba llevar por la timidez y la vergüenza.
Bajó la cabeza y Patroclo lo comprendió.

-No pasa nada, puede ser costoso ser la protagonista -él la consoló.

-Bueno, no es sólo eso... También son los nervios o si cometo algún error, o si desafino porque me dejo llevar demasiado, o también porque el chico me pone nerviosa...

-¿Nerviosa? -Patroclo se sorprendió-. ¿Un chico te pone nerviosa? Puede que alguno sí de miedo o sea desagradable, pero la mayoría son simpáticos.

-No estoy muy convencida -ella dijo no decidida todavía-. Es complicado.

-Yo te apoyo, lo sabes, ¿verdad? -Patroclo la agarró la mano y la miró a los ojos-. Puedes contarme lo que te atormenta...

-No... Es que me da corte...

-¿Por? Si es porque soy un chico no importa, lo puedo soportar -Patroclo se hizo el fuerte.

-Pero no quiero que te lo tomes a mal...

"¿De quién se tratará? ¿Alguien que conozco? ¿De verdad que es tan malo que lo cuente? ¿O puede que sea...?"

-¿Damon? ¿Es él?

"¿Cómo puede saberlo? ¿He dado tantas pistas? ¿O sabe perfectamente que él me incomoda?"

-Eres... muy listo -ella confesó todavía avergonzada-. Esto... ¿No te importa?

-Si es desagradable contigo pues claro que sí.

-De hecho, no lo es. Es... diferente -ella expresó-. No se comporta como normalmente lo hace, la música lo hace diferente... Y canta bien -ella confesó casi con admiración-. No sé qué estoy contando, pero es la verdad.

Patroclo estaba hasta casi sorprendido, pero no era la primera vez que oía que la música afectaba a la personalidad de su hermano. Y le hacía mejor persona, o eso le habían contado.

-Eh, ¿Y cómo canta? Puedes seguir hablando si quieres.

-Es incómodo -ella volvió a decir.

-Lo entiendo -él aceptó.

Y hubo unos minutos de silencio mientras salían de la escuela.

-Canta como si estuviera metido en el papel... La verdad, le pega mucho ser Danny... ¿No le has oído cantar nunca?

-Alguna vez, pero canta normalmente cuando yo no estoy, es como si se escondiera o temiera que me burle de él -Patroclo contó.

-Sí que es misterioso.

"¿Misterioso? Ahora no me digas que se interesa por él... Ojalá no, debe de saber que en el fondo es mala persona y un irresponsable. No la conviene, y la haré entrar en razón"

Patroclo simplemente asintió para no parecer molesto y celoso, que eran sus sentimientos.

-Bueno, nos vemos esta tarde, ¿no? -preguntó Cassie para asegurarse-. Ya sabes, para cantar y practicar...

-Sí, eso es -Patroclo recordó y se despidieron amistosamente.

Horas después, Cassie esperó a que Patroclo apareciese en su casa, la cuál la había ordenado más para su visita.
Llegó puntual y ambos entraron en la casa para cantar.

-Cantaremos Summer Nights, ya sabes, para practicar... -anunció él.

"Prefiero yo ser Danny que mi hermano"

-Vale -ella aceptó.

Y así, ambos empezaron a cantarla. No quedó nada mal en opinión de Cassie, aunque para Patroclo era todo un sueño cantar aquella canción con ella. ¿Por qué le gustaba tanto cantar con ella? Era algo que todavía no entendía y no quería respuestas. Quería esperar un tiempo...

-Veamos, ven al piano -Cassie le pidió a Patroclo que se acercase y se sentase con ella-. Tocamos algo si te apetece...

-Vale. No sé tocar muy bien -él confesó-. Sólo me sé Claro de Luna y una de Beethoven.

"¿Beethoven? ¡Qué elegante!"

-¿Cuál de Beethoven? A lo mejor sé tocarla.

-El Himno de la alegría.

-Qué guay. Esa también me le sé, podemos empezar por esa.

-Sí -Patroclo contestó tímido.

Era la primera vez que tocaba con alguien una canción en piano y no sabía si lo estaba haciendo bien. Cassie no le dijo nada, así que suponía que tocaba bien y no había errores.

"Toca bien" opinaba ella.

-Podemos tocar Viva la vida -él se animó.

Y así fue, tocaron Viva la vida al ritmo correcto y a la perfección. Sin duda, fue una buena tarde donde ambos disfrutaron tocando el piano, cantando y hablando. Y Patroclo cada vez tenía los sentimientos más confusos...

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