Llegué a casa cansado y no pude evitar tirarme en el sofá para descansar unos minutos. Había sido un día muy largo y necesitaba relajarme y sin que nadie me molestase. Por suerte, mi hermano me dejó en paz y era como si yo estuviese solo. Menos mal. Era un alivio que se comportara así conmigo a veces.
Sin embargo la paz duró poco, ya que él me avisó de algo que no sabía cómo tomármelo.
-Cassie va a venir a casa... -me dijo nervioso-. Puedes salir a dar una vuelta si quieres para estar solo.
-¿Eh? ¿No es más divertido que yo esté aquí para enterarme del chisme? -pregunté.
-Pensé que querrías estar solo... pero haz lo que quieras... Sólo... no nos molestes -me pidió suplicándome, cosa que significaba que le importaba aquella chica, tanto como a mí. Esto va a ser divertido-. Viene a las 19:00, así que hay todavía tiempo.
Él se fue a su cuarto y cerró la puerta. Bueno... pues a disfrutar la paz hasta que la chica venga.
No sé qué harán juntos, pero sé que Patroclo no sabe ligar y eso, por lo que todo es seguro. Y por eso les voy a espiar... sólo un poco, como en los viejos tiempos...Qué tiempos aquellos en lo que él invitaba a gente a nuestra casa y yo espiaba desde mi habitación. Mi oído es sagrado y oigo a larga distancia, por lo que me entero de los chismes de las personas con facilidad.
-Quedan 20 minutos, mueve tu culo y haz algo productivo -mi hermano apareció mientras yo estaba recordando, espera, ¿20 minutos? Había estado una hora y media tumbado en el sofá-. Y mejor estate en tu habitación, así no molestas...
-Que sí -le dije levantándome del sofá y dirigiéndome a la cocina para beber un vaso de agua-. Estaré callado.
-Bien...
Así que me quedé en mi habitación los 20 minutos que quedaban y luego arrimé mi oído a la puerta, no oí nada aparte del ruido al abrir la puerta y... una risa de la chica, de Cassie. Tenía una risa muy mona e hipnotizante.
-Pasa -la invitó con tono encantador.
Puaj, parece demasiado educado. Yo la hubiera hecho un gesto y ya. Escuché palabras sueltas y parece que entraron a la cocina para beber agua, así que no oí nada. Menudo fastidio. ¿Y ahora yo qué hago? No me entero de nada, ni de lo que dicen ni de lo que hacen, que espero que no sea nada que me alarme.
Parece que salieron de la cocina... y fueron al salón. Escuché que hablaban de los instrumentos de mi hermano, él tenía una guitarra clásica y un arpa, un regalo que le hizo mi padre hace dos años. Y luego... O no. Iban a ir a la habitación de él y yo estaba pegado a mi puerta.
Rápidamente me alejé de la puerta y me senté en la baqueta de mi batería. ¿Y si toco algo lo suficientemente fuerte para que me oigan a través de mi puerta y llamar la atención de ella? Es la mejor idea que podría tener.
Toqué una canción de rock muy reconocible: We will rock you de Queen. Un temazo. Y supongo que me oyeron porque de fondo oí a mi hermano:
-Estará practicando, supongo que pronto le evaluarán y quiere hacerlo lo mejor posible.
-Oye, pues toca genial -ella opinó.
¿Que todo genial? Es un gran alago sin siquiera conocerme ni verme tocar, pero me emocionó su opinión.
Seguí tocando un pelín más bajo. No quería cabrearle de verdad y él solo fue a su habitación con ella y le enseñó los dos instrumentos. Ella parecía que le emocionó mucho ver un arpa en persona y hasta Patroclo le enseñó a tocarlo un poco.
Puaj, otra vez juntos.
Toqué otra canción, pero esta vez en la guitarra eléctrica, y era la que iba a tocar en el concurso. I wanna be your slave, un temazo más. Y me quedó de maravilla, hasta Cassie me escuchó y hasta pude notar que la incomodaba que yo tocase porque la costaba más hablar con Patroclo, parecía que yo la desconcentraba.
-Mejor paro -hablé en alto sin querer.
Pero por algún casual me oyeron. Y Cassie se acercó a mi habitación y dijo:
-No pares. Sigue -ella me animó y se alejó. Supongo que volvió con mi hermano.
Vaya vaya, que quiere que siga. Pues sigo. Enfaticé la letra y subí el tono un poco, sobre todo en las partes más "guarras". Y no me fue mal, me di cuenta que así quedaba mejor y así es como cantaría en el concurso. Luego canté otra de Måneskin, en este caso Gossip, que me quedó también perfecta y no supe la opinión de ninguno de los dos, me estaban ignorando.
Supongo que el tiempo pasó muy rápido porque cuando me quise dar cuenta, ella ya iba a irse y decidí salir de mi cuarto para despedirme. Hay que ser cortés de vez en cuando.
-Ooo, adiós a tí también Damon, se nota que te gusta el rock -hizo con las manos el símbolo del rock y se fue sonriente.
Cada día me gustaba más esta chica y cada día era menos mía...
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Wonderland
Roman pour AdolescentsEn una ciudad llamada Wonderland, una joven escritora se muda a dicha ciudad para continuar con su carrera. Lo que no se espera es que hubiera tanto drama. Sí, drama. El típico chico que se enamora a primera vista de ella, pero ella no está conforme...