Wonderland

¿Confusiones o algo más?

Oficialmente era el último día de clase del trimestre. Y Bella y Cassie habían acordado quedar con unas amigas y comer juntas. Bella lucía una ropa abrigada al hacer mucho frío, pero estaba radiante y su amiga Emma se lo dijo en cuanto la vio:

-¡Bella! ¡Hola! -se abalanzó sobre ella sonriente-, ¡qué guapa estás!

-Aww, gracias. Tú también -la elogió mirándola de arriba abajo. Luego añadió:-. Estoy deseando que acabe este trimestre. Se ha hecho largo... -alargó la o.

-Un poco -sonrió-, pero hoy hay que disfrutar, ¿eh? Y quiero conocer a esa amiga tuya...

-Ya la verás -Bella la dijo sonrojada.

Apenas habían hablado desde el beso. Más bien se enviaban vídeos por Instagram y Tik Tok. Y Bella estaba bastante nerviosa por cómo sería su relación a partir de ahora. No era fácil.

Aquiles apareció en la sala donde ambas estaban conversando y se sentó al lado de una de su grupo de amigas.

-Tranquila -dijo Emma en cuanto Aquiles se sentó-, él no sabe sobre nuestra comida.

-Muchas gracias. Te debo una -asintió y se sentó junto a ella para comenzar las clases.

Hoy era un día afortunado. Era un día libre en el que podían escribir lo que quisieran, relatos libres o seguir con lo que estuvieran escribiendo.

Bella siguió con la historia mágica ambientada en Harry Potter mientras que Emma seguía con su historia ambientada en Marvel.
Cuando las clases finalizaron Emma y Bella se fueron juntas en el bus. Habían quedado con Cassie y Anne dentro de media hora, pero sabían que podrían llegar tarde por culpa del bus.

-Llegará en breve -Bella la decía a su amiga preocupada porque ya habían pasado cinco minutos-, ¿estás tiritando? Normal. Hace -3 grados. En el bus hará calor -ella se puso los guantes y le dio unos a su amiga-. Cassie me acaba de avisar de que ellas están de camino -dijo tras chequear su móvil.

Y así era. Cassie y Anne estaban de camino con el coche de Anne. Ambas disfrutaban de una playlist de 90 minutos que se habían creado. Cassie no sabía cómo sería volver a ver a Bella después de lo del beso... pero intentó no pensar en ello cantando sus canciones favoritas de Coldplay. Tenía suerte de que su amiga tuviera los gustos muy parecidos.

-¡Ya llega! -exclamó Emma de un momento a otro con alegría, ya no se moriría de frío-. Coge asiento que yo pago lo tuyo...

Bella se sentó y esperó a que Emma se sentara con ella. Ambas permanecieron calientes durante los próximos 10 minutos y, en cuanto llegaron, vieron la silueta de una chica de cabello pelirrojo: Anne. Estaba llamando por teléfono a alguien y en cuanto vio a dos chicas saludándolas, las imitó. Al acabar la llamada se acercó a ellas.

-Hola, Anne -saludó Bella-, ¡qué frío!

-Sí -Emma coincidió-, entremos -pidió.

Todas entraron. En una mesa las estaba esperando Cassie, que ya no tenía un abrigo puesto, si no una sudadera bastante bonita y calentita. Bella se acercó a ella y la dio un pequeño abrazo. Cuando se separaron, la susurró:

-Hola.

-Hola.

-Sentáos y pedid -pidió Bella al resto de chicas que se habían quedado de pie.

Eso hicieron. Bella pidió un plato de espaguetis y un pescado, Cassie una lasaña y unas patatas fritas, Anne lo mismo que Cassie y Emma unas croquetas con una ensalada. Una comida interesante.

Todas comentaron su vida para conocerse y Bella era la que más hablaba. Cassie no se quedaba atrás. Las más introvertidas eran las amigas de ambas.

-Eh, Bella, dime una cosa:- susurró Anne a Bella-, ¿es cierto? ¿Que tú y ella...? -miró a Cassie por el rabillo del ojo.

-Todavía no está claro -Bella aclaró susurrando también-, pero hoy lo vamos a hablar.

Ella asintió y guiñó el ojo a Emma. Sabía que tenían un plan para dejarlas solas. Y a Bella eso la inquietaba y la ponía nerviosa. Pasar tiempo a solas con Cassie...

-Chicas, tengo que ir al baño...

-Yo... también -dijo de repente Anne siguiéndola el juego-. Pagad nuestra parte. Está en la mesa -señaló el dinero que habían dejado previamente.

Anne y Emma se fueron al baño de mujeres y mientras Bella y Cassie se quedaron a solas. Bella no miraba la cara de su amiga por miedo, sabía que era el momento de hablar y creía que era mejor no mirarla a los ojos o se moriría de vergüenza. Cassie es la que empieza a hablar tras unos segundos callada:

-Eee. Creo que deberíamos hablar sobre el otro día...Ya sabes -dijo mirándola a los ojos.

Bella inmediatamente levantó la mirada y ambas se miraron.

-Sí -asintió la chica rubia levemente.

-Todavía no tengo claro lo que siento... -confesó Cassie con duda.

-Entiendo -logró decir Bella confusa.

-Y no te parece mal? -preguntó sorprendida.

-No, tómate tu tiempo -dijo sincera.

-Sí...

Cassie estaba nerviosa porque ya no sabía qué decir. Pero duró poco la incomodidad, ya que Bella se acercó más a Cassie y la abrazó. Fue una abrazo tierno. De amistad.

La peli castaña al separarse se sonrojó, cada vez se sonrojaba más. Eran los efectos secundarios.

De un momento a otro apareció en el restaurante un chico con pinta de rockero y unas gafas de sol, las cuales las guardó para que se pudieran apreciar sus preciosos ojos azules cristalinos. Era Damon y se acercaba a donde ambas estaban.

Bella no supo qué pensar al verle la cara, pero Cassie sí: viene hacia aquí... ¿Por qué ahora?

Como Bella sabía que iba a hablar con ella, le echó una última mirada y se alejó para pagar.

-Hola, Cassie -Damon la saludó sonriente-, ¿qué tal el último día? No te he visto hoy en clase...

-Bien, Damon. ¿Y el tuyo? ¿Vienes a comer aquí?

-Ojalá. Solo vengo a buscar a otro amigo mío. Está en la mesa de la derecha -señaló a uno que no conocía de nada para ocultar su mentira.

De hecho, Damon solo estaba ahí para ver a Cassie. Sabía que iban a comer y solo quiso verla antes de volver a empezar otro trimestre. Él rompió el silencio preguntando:

-¿Este invierno te quedas aquí? -preguntó curioso.

-Sí. No me voy a mover de la ciudad. Además de que mis amigos están aquí.

-Genial. Lo decía porque puede que dentro de poco actúe con mi amigo en un bar, por si te apuntas a vernos -la ofreció.

-Claro, puedo ir si no tengo ningún plan -Cassie asintió-. Veo que vais bien. Tú y Damiano digo. El dúo.

-Sí. Hemos sacado un par de canciones y covers -informó orgulloso-. Puedes escucharnos en Instagram y YouTube.

-Ya... lo he hecho -Cassie contestó colorada.

Cuando se aburría escuchaba las canciones, pero no quería admitir que le gustaba.

-¿Y qué opinas? Sé que canto bien...

-Me gustan -le interrumpió-. Suenan muy bien cuando las cantáis vosotros -se arrepintió de lo que acababa de decir y se corrigió:-, digo, qué hacéis que suene mejor cantando vosotros.

-Sí -Damon asintió ante la corrección de Cassie.

La conversación paró al ver regresar a Anne y Emma.

-Hola, Damon -la pelirroja le saludó.

-Voy a por mi amigo -disimuló y se fue a la barra.

Cassie, después de esa conversación, decidió una cosa: necesitaba hablar con Damon sobre sus sentimientos.