La última vez

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Como olvidar ese día? Nunca lo haré… nunca olvidaré cuantas veces le falle… y aun así ella se quedó. Yo era un demonio en ese entonces… y aun así se quedó. La ignoraba y trataba mal frente a todos… y aun así se quedó. Incluso le fui muchas veces infiel… y aun así se quedó. Se quedo diciendo que había algo rescatable en mí, algo por lo que luchar, algo que por supuesto yo no podía ver.

Recuerdo que estábamos en su habitación y ella estaba ideando un plan A, B, incluso hasta un Z. pero yo… yo solo la miraba… memorizando los detalles de su rostro, como si fuera la primera vez que la miro… o la última…

Sus padres se la llevaban bien lejos de mí, a un sitio donde no la iba a volver a ver. En contra de nuestra voluntad, pero muy a favor de la de ellos mismos ya que nunca estuvieron de acuerdo con lo de nosotros.

Mientras ella hablaba, yo observaba. Su vos corría velozmente, pero yo no escuchaba nada, un enfermizo silencio se apoderaba de todo…pero yo solo podía mirarla… dibujarla en mi mete… sus lunares, el hueco de su sonrisa, sus labios pequeños y rosados, su cabello dorado, sus ojos verdes… la forma en que emocionada decía ideas locas que no podía escuchar porque estaba hipnotizado viéndola.

Era muy hermosa… incluso haciendo gestos raros su precioso rostro no se mal formaba, ni perdía su dulzura, su toque de inocencia.

Y cuando ella me pregunto ¿Qué crees? No pude reaccionar de otra manera que besándola. Fue el beso más largo de mi vida… también el más real que eh dado. No quería soltarla, planeaba grabar en ser el sabor y la forma de sus labios, la manera en la que mordía los míos, la excitación que me daba probar su lengua.

Esa noche por primera vez hicimos el amor… habíamos follado incontables veces…pero eso sencillamente fue algo más, algo distinto, algo único, algo completamente irrepetible. La lentitud con la que se movían nuestros cuerpos. La forma en la que besábamos nuestros poros. El deseo con el que mordía sus curvas. La manera en la que amamos nuestros sexos. El olor inolvidable a su orgasmo.

Un momento mágico convertido en un siglo, una hora y media de vida que pareció haber tardado 7 vidas enteras. Yo aun no soy digno de ese recuerdo Eli… no soy digno de haberte tenido… no tenia el derecho de haberte destruido… por eso el injusto karma decidió darme el peor escarmiento que se le puede dar a alguien, y es arrebatar para siempre a alguien a quien amas.

No se si alguna vez me perdonaste, pero esta de más decir que quien merecía la muerte era yo y no tu… pero esta vida no es justa… y mi mente me castiga con esa última vez…

Fragmentos de mi mente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora