From and forever

chapter ten

Cuando llegué a casa ya estaban Melissa y mi madre preparando su desayuno.

- ¡Belly! ¿Dónde estabas cariño? -

- Dando una vuelta en la bici. ¿Está despierto alguien? -

- Sólo Walker -

- ¿Y Pete y papá? -

- En la cama todavía -

- Que bien -

- Ah por cierto, el otro día llamó Emma -

- ¿Qué decía? -

- Que si hoy podías ir a su casa por la tarde -

- ¿Puedo? -

- Pues claro - dijo Melissa. - También dijo que si te podías llevar a Liam -

- Ah vale. Gracias - sonreí.

Como no tenía nada que hacer, le pregunté a Melissa que si había que comprar algo. Ella me dijo que había que comprar unas cosas en el mercado, pero que no me preocupara.

- ¿Puedo ir yo a comprarlo? Por favor Melissa - dije haciendo pucheros.

- Vale, pero date prisa -

- Sí sí, ¡te quiero! -

El trayecto me lo hice en bici. Me encanta montar en bici.

Cuando llegué al mercado, cogí lo que había que coger: huevos, queso, zumo de naranja y manzanas.

Después de pagar, me dirigí hacia la puerta, donde estaba mi bici.

Puse la bolsa con las cosas en la cesta de la bicicleta, y empecé a dar pedales.

- ¡Ya he vuelto! -

- Muchas gracias cariño - me dijo Melissa dándome un beso en la frente.

- No es nada - la sonreí.

- ¡Belly! -

- Hola Liv -

- ¿Dónde estabas? -

- Comprando unas cosas -

- Qué aburrido -

- ¿Aburrido? ¡Ven aquí! - empecé a hacerle cosquillas.

- ¡Para para! - decía riendo.

- Bueno Livvie, ¿qué tal te llevas con Tanner? -

- Muy bien, es mi mejor amigo. Y hemos hecho un pacto -

- ¿Un pacto? -

- Sí, que vamos a ser amigos para siempre -

Tanner y Olivia me recuerdan a Walker y mí en cierto modo.

- Que guay -

- ¿A que sí? -

- Sí -

- Bueno, ¿hacemos algo? -

- ¿Desayunar? - dije riendo.

- Sí, que tengo hambre -

- ¿Cuándo no? -

Ella se hizo la indignada.

- Venga vamos - la dije.

Después de desayunar, nos fuimos todos a la playa.

Quedamos allí a las once, ya que cada uno tenía que llevar cosas, y ordenar las habitaciones...

Quedamos en que Melissa y mi madre se quedaban en la playa esperando, porque siempre son ellas las que hacen todo. Los pequeños llevan la crema solar, eso ya es mucho pedir. Los padres llevan comida para la media mañana, y nosotros llevamos cada uno sus cosas.