Mi escritor favorito (Dekubaku) Finalizada

Capitulo 11

M̳i̳ e̳s̳c̳r̳i̳t̳o̳r̳ f̳a̳v̳o̳r̳i̳t̳o̳

Capítulo 11

Ya había transcurrido una semana y no tenia respuesta de Izuku, todos los días mandaba un, buenos días, sin falta y se despedía al dormir, pero nada. Continuo actualizando sus historias, ahí tampoco había alguna señal que estaba en conexión ese chico, sin darse cuenta empezó a sufrir ataques de ansiedad, Kirishima desde luego que lo notaba, pero lo dejaba pasar quizás los últimos días de clase lo tenían asi.

Entre las cosas que tenia que entregar a tiempo en la escuela, calificaciones, boletas, el ultimo resumen de las habilidades de sus chicos, lo mantenían ocupado, después de todo eran mas de 50 alumnos los que tenia a su cargo y escribir una por una cada reseña es bastante agotador.

Era un lunes y todo transcurría "normal", llego a casa de algún modo se sentía bacía, le faltaba algo, reviso su celular, sin respuesta alguna, subió a su cuarto con pesadez, suspiro. -¿Donde estas? ¿Te cansaste de mi? ¿Quizás debí ser mas asertivo? Asi no te hubieras alejado de mi, tenia miedo, ¿Que pasaría si marcara? y no había respuesta. Se le salieron unas lagrimas, abrazo su almohada y se empezó a quedarse dormido con un dolor en el pecho.-

-¡No me dejes! Vuelve a mi por favor ...-

Despertó desesperado ya habían pasado 9 malditos años sin haber soñado con su chico peli verde, lo destrozo ese sueño ya no podía con mas sufrimiento, agarro su teléfono y lo primero que hizo fue marcar al numero de Izuku ... El numero que tratas de localizar se encuentra temporalmente apagado o fuera de servicio... No no podía ser, se abrazo a si mismo... Sin percatarse abrió de nuevo el lazo transmitiendo todas sus emociones, pero del otro lado del lazo sentía paz, tranquilidad, eso fue lo que pudo ayudar de nuevo a conciliar el sueño.

Izuku ya se encontraba en Japón realizando los contratos con la constructora, aportando ideas para los planos de la construcción de su editorial, olvido prender su celular, no tenia tiempo para desviar su atención desde que llego hace ya una semana.

Llego a su hotel, empezó a cenar, se ducho y se recostó en la cama, era mas su cansancio físico y mental que quedo en poco tiempo dormido.

-¡Te necesito!, tengo miedo.- Maldición ¿Que fue eso? Despertó sudando pero trato de calmarse... pero esa voz lo llamaba era su soulmate, entonces si lo necesitaba ¿Porque cerro el vinculo? No entendía lo que había pasado.

-Cálmate Izuku ya habrá tiempo para buscarlo, respira,- Se tranquilizo, fue a tomar una vaso de leche tibia para poder volver a dormir, necesitaba descansar mañana tendría unos planes por hacer y necesitaba su completa atención.

Paso otra semana mas donde las pesadillas para ambos no dejaban de hacer presencia cada noche al dormir, pero Izuku se calmaba, su temperamento no lo dejaba flaquear tenia cosas igual de importantes que realizar su segunda meta estaba por cumplirse no podría detenerse ahora, quizás era una forma de venganza para su soulmate por haberlo abandonado todo este tiempo, ahora él lo tendría que esperar. Katsuki por su lado era aterradora la forma de su sueños como lo llamaba, pero se escuchaba distorsionada la voz de su soulmate, pero la imagen quien no lo hacia dudar, estaba pagando todo lo que quizás le había pasado a su chico, al menos pensaba y estaba "seguro" que en ningún momento abrió el vinculo solo el temor de ser desechado de nuevo le traía ese recuerdo.

Llego el fin de curso, celebro sin muchas ganas ese ultimo día que tenia con sus chicos, -Vaya mocosos hasta que me desharé de ustedes, por favor si tienen alguna duda o necesiten algo para el siguiente año, no duden en recurrir a mi-

-Gracias sensei- en un grito en unísono dijeron todos sus alumnos, se amontonaron para irse a despedir. Termino la celebración y salieron de la escuela.

Katsuki salió lo mas rápido posible no estaba de humor para aguantar a sus colegas quería llegar a casa y refugiarse en una de sus historias hasta conciliar el sueño, aunque las pesadillas lo despertaran. Ese día no fue en su moto, quería caminar despejarse, respirar tranquilamente mientras llegaba a su hogar.

Se encontraba en el cruce, del semáforo se encontraba en rojo para poder pasar al otro lado, a la mitad del camino escucho una voz demasiado familiar, volteo pero recibió un mensaje de su celular lo saco, reprodujo la nota de voz mientras buscaba de donde provenía esa voz:

🎵-Perdón hermoso, he tenido demasiado trabajo, por eso no había podido contestar, pero estoy demasiado cerca de lo que crees.- De repente vio lo que jamás en su vida pensó ver, una mata de cabellos verdosa y al voltear solo un poco aquel chico vio sus pecas y su ojo de color esmeralda.

-¡Dios santo... es él! Quiso ir a buscarlo pero entre la multitud se perdió, no vio para donde fue. -Maldición juro que era él...-

No le quedo de otra que seguir su camino lo busco pero no lo vio mas y que rayos era el mensaje -¡Me estoy volviendo loco!- Se regreso a su casa con sentimientos encontrados.-Tengo que contestarle.-

🎵-Ok esta bien, espero que tus días sean menos complicados que los míos... por cierto mi nombre es Katsuki.- De alguna forma esto le reconfortaba no se fue por su personalidad, solo no pudo contestar porque estaba demasiado ocupado, le dio un verdadero respiro al peli cenizo.

Izuku sin proponérselo se encontraba en la misma ciudad que su escritor, por unas firmas que necesitaba con uno de los inversionistas, termino lo mas rápido que tuvo, asi quizás fuera sorpresa que fuera a la escuela de su amado escritor, marcarle y conocerlo de una vez por todas, pero conocía lo desconfiado que es asi que decidió solo ver donde se encontraba el lugar.

No se percato de que estuvo a unos escasos centímetros de encontrarse con su complemento y llevarse una verdadera sorpresa.