Capítulo 38-

9K 463 62
                                    

Capítulo 38-

8 de enero de 2016.

─No, no, no, no. ─Protesto, revolviéndome entre las sábanas y haciendo reír a Jesús.

─Lore, tenemos que ir a clase.

─No quiero, en serio. Mátame.

─Levántate, pesada─ Ríe él, haciéndome cosquillas.

Después de las vacaciones en Punta Cana, de que todo fuera genial, de pasar unas navidades excepcionales... Toca vuelta a la rutina. No puedo. Suelto un suspiro de pura frustración y Jesús se echa a reír con ganas.

─Que sueño más pesado tenéis los Martínez, eh─ Escucho a Dani desde la puerta.

Le sonrío. A él también le contamos David y yo toda la verdad de lo que había pasado en Galicia y los gemelos acabaron de explicarle a David la historia de su madre. Si los cuatro estamos por guardar secretos... Pues los guardamos todos entre los cuatro, que es mucho mejor.

─Y que sueño más ligerito tenéis vosotros, joder─ Protesto, frotándome los ojos.

─Lo que no entiendo es cómo no tienes frío─ Suelta Dani con una carcajada.

Llevo un pantalón corto de pijama y una camiseta de manga larga bastante finita.

─Nada comparado con Galicia─ Comento, soltando una carcajada mientras abro el armario para escoger la ropa para el primer día de clase de este nuevo año que he empezado con muchísimas ganas.

Y para qué negarlo, lo he empezado con muchísimas ganas gracias a Sevilla, a mi hermano, a mis tíos, a Lucía y a los gemelos. Al final sí que le voy a agradecer a mi madre el cambio de aires.

Que hablando de mi madre... No hemos hablado demasiado con ella ni con mi padre, solo lo necesario, pero aún no se sabe nada del tema de nuestra custodia ni de cómo acabará su divorcio. En fin, todo a su tiempo.

Bostezo mientras saco unas mayas negras y una sudadera verde oscuro del armario. Luego me escojo unas adidas blancas con los detalles en verde, que por cierto fueron el regalo de mi tía por estas navidades.

─¡El desayuno va a estar listo en diez minutos! ─Exclama Dani, al sentir como mi hermano sale de su habitación.

Les toca a ellos prepararlo. Y tardan lo suyo, que ni que fuese tanto trabajar calentar leche en el microondas y poner tostadas en la tostadora, pero bueno.

─ ¿No me das un beso de buenos días? ─Pregunta Jesús detrás de mí.

Me giro para sonreírle. Lo bien que me han ido las cosas con él es algo complicado de explicar con palabras. Me acerco a abrazarlo y le doy un beso suavecito.

─Buenos días. ─Susurro contra su boca.

─Buenos días─ Me responde con diversión. ─Y apura que vamos a llegar tarde.

─¡Díselo a los que tienen que hacer el desayuno! ─Suelto echándome a reír.

Me fijo en que Jesús ya está cambiado y se sienta en mi cama con gran calma.

─ ¿Piensas quedarte mientras me cambio? ─Interrogo, alzando una ceja.

─No estaría mal─ Decide, echándose a reír.

─Si te quedas mientras me cambio no nos vamos y lo sabes─ Amenazo en broma, con una carcajada, agarrándole luego de la mano─ Ala, corre a hacer el desayuno.

**

Tengo la playlist de "verano 2015" sonando a todo volumen. Es que es la única forma de motivarse que hay durante el curso y lo sabemos todos.

¿Sabes lo que quieres?(Gemelier)(Jesús y Daniel Oviedo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora