Después de los devastadores eventos de la Danza de los Dragones, Westeros se tambalea en busca de estabilidad bajo el reinado de Aegon III, hijo de Rhaenyra Targaryen. Entre los pocos supervivientes de la casa Targaryen se encuentran Alyssane Velary...
Llegaron a Desembarco del Rey y ambos se apresuraron a llegar a sus aposentos. El olor a dragón se percibía a kilómetros. En el camino, se encontraron con una Elinda preocupada, quien se dirigió hacia Alyssane para preguntarle sobre su paradero. Alyssane sonrió y le comentó sobre su aventura. A un lado estaba Benjic, que parecía apurado en irse. Alyssane pidió a Elinda que preparara un baño para ella y Benjic. Elinda aceptó y fue a hacer lo solicitado.
Mientras caminaban, podían ver a los lores, damas de la corte y criados hacer reverencias, lo cual ponía un poco ansioso a Benjic. Él le preguntó a Alyssane si siempre eran así, a lo que ella respondió que suponía que sí.
Ya en la habitación, ambos se desvistieron y se ayudaron a bañar mutuamente. Alyssane se ofreció a lavar el pelo de su esposo. Mientras lo hacía, ambos tenían una conversación.
Benjic: "Nunca pensé que volar en un dragón sería tan... intenso."
Alyssane: "Es algo a lo que uno se acostumbra, pero siempre es emocionante."
Benjic: "¿Cómo fue la primera vez que volaste en Furia Nocturna?"
Alyssane: "Tenía miedo, pero también sentía una conexión muy fuerte. Sabía que Furia y yo estábamos destinados a volar juntos."
Benjic: "¿Crees que nuestro hijo también volará algún día en un dragón?"
Alyssane: "Si los dioses así lo quieren. Aunque también me gustaría que tuviera la opción de elegir su propio camino."
Después de la conversación, se sumergieron en el agua caliente, disfrutando de la tranquilidad del momento.
Después del largo baño, Alyssane se encontraba sumida en sus propios pensamientos. Mientras cepillaba su cabello, se miró en el espejo y notó que su barriga estaba notablemente grande.
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Por instinto, se acercó al espejo y comenzó a tocar su vientre. Benjic la sacó de sus pensamientos cuando la abrazó por detrás y besó su cuello. Sostuvo su barriga, y Alyssane echó su cuerpo hacia atrás, poniendo su cabeza en el hombro de Benjic. Él acariciaba su barriga, sabiendo que era algo que le daba tranquilidad a Alyssane. Con una sonrisa divertida, le comentó que su bebé crecía rápido, a lo que Alyssane asintió.
Benjic ayudó a Alyssane a vestirse. Ambos ya estaban listos para continuar con su día, había cosas por hacer. Benjic mencionó que iría a entrenar con Viserys, Corwin y Adam. Alyssane asintió y le dio un pequeño beso en el mentón. Ella le dijo que iría a ver al maestre junto con Elinda para asegurarse de que su bebé crecía de manera saludable. Benjic asintió y le aseguró que su bebé seguiría creciendo fuerte y saludable. Alyssane agarró su cuello y ambos pegaron sus frentes. Benjic le recordó que no podían quedarse por mucho tiempo, ya que él tenía que volver a ocuparse de su tierra y su gente. Alyssane comprendió y asintió.
Alyssane ayudó a Benjic a ponerse su capa y se despidió de él con un beso, prometiendo verle más tarde. Más tarde, Elinda y Alyssane se dispusieron a visitar al maestre. Ambas llegaron, y aunque Alyssane se sentía nerviosa, Elinda le daba consuelo y sostenía su mano. El maestre terminó de revisarla y dio las buenas noticias de que el embarazo iba bien, además de proporcionar una fecha aproximada para el nacimiento del bebé.
