Capitulo 34 /prt2

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Pipe González otaño

Me encontraba conversando con Kuku y la novia mientras les enseñaba la playa, así mismo aprovechaba de sacar algunas fotos, me hacía distraerme de pensar en Miel. No podré hacer una vida sin ella.

—¿Seguimos?— La chica sonrió en nuestra dirección y yo asentí con la cabeza para luego seguir caminando junto a ellos.

—Eu— Me voltee para ver a Esteban, quien se quedó parado usando el celular —Vení, vamos—

—Ehhh— Levantó la mirada y la dirigió en dirección contraria —Blas me dijo que Miel te está buscando—

—¿A mí?— Sonreí voltando y ví como Miel movía los brazos dando saltitos. Mi corazón comenzó a acelerarse y miré a Kuku mientras caminaba yéndome.

—Anda galán, después vamos a la casa— Me guiñó un ojo y se acercó a su novia.

Yo no dudé y caminé rápidamente dónde Miel mientras ponía mi cámara hacia mi espalda para poder abrazarla sin que ninguna de las dos salga lastimada. Prefiero morir que ver a Miel o a mi camara hecha trizas.

—¡Pipe!— Chilló de una forma muy divertida, que de hecho la imité.

—¡Miel!— Sonreí agarrando sus manos —¿Que pasó?—

—Te amo— admitió sin algún filtro de por medio y sin dar vueltas.

Mi corazón comenzó a latir de forma inhumana, en mi cabeza no entraba la idea de que Miel viniese por mi, creí que todo estaba perdido hasta este momento.

—¿Después de todo este tiempo?— Sonreí intentando no verme nervioso ni cursi, ya que estaba citando nuestra saga favorita.

Si Matías estuviese acá me haría bullying el resto de mi vida. 

—Always— Me respondió al instante, su respiración estaba temblando y supuse que temía por mi respuesta, por más de que era muy obvia.

—Yo también te amo— puse ambas manos en su mejillas, le di un besito y luego la abracé fuertemente —Y quiero estar con vos, quiero que volvamos, en serio te amo y me quiero hacer viejo a tu lado, quiero verte con tu cabecita blanca y un par de arrugas— Sonreí contento.

—Yo también quiero hacerme viejita a tu lado— Me sonrió tiernamente con sus ojitos verdes azulados. Extrañaba mucho ver esta versión de ella.

Finalmente con Miel decidimos dar un pequeño paseo por la playa, parecíamos chicle de lo empalagosos que andábamos.

—Pipe— Miel me trajo de vuelta a la realidad.

—¿Que?— Sonreí atentamente a lo que sea que quisiera decirme y pasé el brazo sobre su hombro.

—¿Cómo le diré a Simón?—

Mi cara de desfiguró, pero quería disimular mi clara molestia por la pregunta y solo negué con la cabeza.

—¿A qué te refieres?—

—Él está durmiendo en nuestro cuarto y creí que querías volver a dormir conmigo... No sé— Se encogió de hombros.

—Aaaaah— Sonreí —Yo me encargo de eso, vos tranquila—

Miel Vogrincic

Con Pipe tuvimos una reconciliación algo simple Pero linda, extrañaba estar de novia con él y saber que me pertenece, jodaaaa (yo no jodo).

Cuando por fin llegamos a la casa; Malena, Matías, Juani, Simón, Kuku, Blas y la novia de Kuku estaban reunidos en el living charlando.

—¡Holaa!— Saludé con gran emoción.

Kuku, yo sé que te dolerá lo que diré a continuación, pero tenes que seguir adelante mi amor, sin mi. Ahre.

—Volvimos— Abrí los brazos.

—Si, los vemos— Matías me miró obvio.

—¿Mate?— Malena nos sonrió.

Kuku le acercó el termo a Malena y luego abrazó a la novia poniendo su otra mano en la pancita de ella.

Me puse una mano en el pecho sin descaro —No, gracias. No quiero mate—

—Ehh, ¿Volvieron volvieron?—

—Sí, Simón. Volvimos, estamos de novios otra vez.— Pipe respondo por mi, me dió un besito y se fue a sentar para incorporarse con los chicos.

—Supongo que van a querer el cuarto de nuevo— Nos miró atentamente a los dos.

—Hablan de eso después, si?— Malena nos interrumpió —Ahora vení Miel, siéntate con nosotros—

—¿Dónde hay espacio?— Miré hacia todos lados.

—Acá— Dijeron Pipe, Blas y Simón al mismo tiempo.

Sonreí inevitablemente.

Ellos se miraron entre sí y volvieron a repetir la misma palabra al mismo tiempo, de forma competitiva.

—O acá si querés— Kuku se hizo a un lado, seguro para evitar conflicto con los chicos.

Muero del ganas de estar al lado de él, Pero soy papa casada y él será papá, con la mente que tengo no me puedo sentar ahí.

—Tranqui, me voy a sentar con mi novio— tomé esa gran decisión madura.

—Dale, Maple, apura el trámite— Matías me miró negando con la cabeza.

Asentí con la cabeza y me senté entre Pipe y Malena.

—¿De que hablaban?— Sonreí

—Nos poníamos al día, no tenemos mucho tiempo ya que se irán mañana— Dijo Juani con un tono nostálgico.

—Y si boludo, si yo ni siquiera vivo acá— Blas comentó con una sonrisa mientras se acomodaba los rulos.

—¿Dónde vivís?— pregunté curiosa.

—En España— me miró con una sonrisita.

—Que soy argentino, tío— Simón rió.

Todos reímos menos Kuku.

—Yo... Yo no entendí— Kuku se rascó la nuca.

Es un señor, lo amo.

Nos quedamos hablando hasta el otro día, había mucho que decir y los chicos se tenían que poner al día, hace mucho que no convivían entre ellos.

A eso de las 10 de la mañana, Kuku y su novia, junto con Blas se fueron porque tenían un vuelo, por fin todos nos pudimos ir a dormir.
Aunque Pipe y Simón se quedaron intercambiando las cosas de los cuartos mientras que yo dormía con Juani, calculo que se quedaron dormidos a eso del medio día.

[...]

Holaaaa, volví!!!!. Espero que sigan acá.

Fue un capítulo corto pero es que recién estoy volviendo, mañana volvemos con más y creo que escribiré los últimos capítulos.

No volveré a irme hasta terminar con esto jajajaja y luego haré otra historia si quieren.

Estoy algo oxidada entonces me costó mucho escribir, no sabía cómo ni qué palabras usar jddjdjd.

Perdón la demora, me tenía que leer la historia desde cero para poder seguir escribiendo y me di cuenta la linda relación que hay entre todos, re lindooo, soy alta escritora chau JAJAJAJAJA.
Es que todos se aman tanto entre todos, todos se bancan mucho y se cuidan, me parece muy lindo. No lo había notado.

Vení conmigo || Felipe Otaño Donde viven las historias. Descúbrelo ahora