Vení conmigo || Felipe Otaño

Capitulo 9 /prt2

Miel Vogrincic.

Pasé una noche estupenda, con Felipe salimos a cenar y la noche se nos hizo muy corta, nos faltó tiempo.
Ahora estábamos en el living junto a los chicos.

Miraba tiktok hasta que me apareció uno de Simón en el que se vestía, hice una sonrisita, miré a Simón y volví a ver el vídeo, era muy hipnótico. Vi el vídeo una y otra y otra y otra vez.

—¿Y esa carita?— Matías me miró —¿Que es lo que tanto miras?— dijo con un tono curioso y divertido a la vez.

Pipe dirigió su vista a mi.

—Estaba viendo un meme— mentí mientras hacía como si usaba el celular.

—¿A Ver?— Dijeron todos a coro con un tono ansioso, en verdad tenían ganas de verlo.

—¡Ups!— me encogí de hombros —Lo perdí— dije tirando una risita nerviosa.

—Yo lo busco— Simón se sentó a mi lado y estiró la mano, no sabía que hacer así que solo asentí con la cabeza y le pasé mi celular —Soy un capo, ojo— Pasó su brazo sobre mis hombros.

Miré a Felipe y sonreí al ver cómo se acercaba, se sentó al otro lado mío y comenzó a llenarme la cara de besos.

—Te amo— Me sonrió. Estaba marcando territorio.

—Yo a vos— Le di un besito en la punta de la nariz.

—Eeh Toma, no encontré el meme— Simón interrumpió mientras quitaba su brazo de mis hombros dejándome impregnado su perfume.

—Tan capo no eras— dije mientras agarraba el celular y le sonreía.

—Ajá, shh— Me hizo callar.

Antes de poder responder sentimos un ruido ensordecedor, fue algo más como un estruendo. Nos quedamos todos en silencio mirandonos.

—Tengo miedo— dije mientras me acercaba aún más a Pipe quien seguía a mi lado, él pasó su brazo por mi espalda y me atrajo hacia él de forma protectora.

—Iré a ver— Dijo Matías mientras agarraba la escoba —Usaré esto como arma—

Nos cagamos de risa en su cara, aunque estábamos muertos de miedo.

—Voy con vos— Dijo Simón.

—Yo también— Pipe se levantó.

—No, vos no...— Me levanté del sillón y lo abracé.

—No pasa nada, vos quédate con Malena y con los chicos no nos demoramos—

Asentí con la cabeza. No quería pero peor era que alguno vaya solo.

Nuevamente retumbó todo y me abracé de Pipe, mi novio me comenzó a hacer mimitos.

—Vamos Juani— Matías lo miró.

—Ni en pedo— Negó con la cabeza.

—Vamos dije— Lo agarró por los rulos y así fue como los cuatro chicos fueron a investigar.

Con Malena nos quedamos en el sillón esperando a los chicos, se sentían más estruendos y nosotras moriamos de miedo.... Y curiosidad a la vez.

—¿Vamos a ver?— Le propuse.

—Me leíste la mente—

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Nuevamente estábamos todos reunidos en el sillón, nadie decía nada, solo nos mirábamos, hacíamos sonrisitas y seguíamos respirando solamente en silencio.