Baile 1/3

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(Capítulo 15)


FRANCESCO:

¿Eres Anna Williams?

Sí, ¿y tú quién eres?

La vida y sus sorpresas. ¿Quién diría que me encontraría a Anna de esta manera? La contemplo y es muy preciosa. Ya sé por qué el farsante de mi hermano está tan loco por ella.

Necesito buscar la forma de acercarme más; quiero crear buenos vínculos, sé que nos necesitaremos en un futuro próximo. Continúo observándola y, detrás de toda esa belleza, me percato de que ella no está bien mentalmente. Algo le está afectando y carcome su vida.

Soy el hermano de John. Creo que asiste a tu misma secundaria.

Se pone un poco nerviosa y sus gestos son de desagrado hacia él.

Sí, lo conozco —me confirma, un poco distante.

Ya veo. En ocasiones, es un poco pícaro y rebelde. Me disculpo por él si algún día te llegó a ofender de alguna manera. Es que veo en tu mirada que mi hermanito no te cae muy bien.

No es eso. Le agradezco mucho de cierta forma.

Anna me explica con detalles que él la salvó de un tal Harry que intentó aprovecharse de ella. Eso quiere decir que la ama de verdad. El problema es que su amor no es benigno, ya que lo está convirtiendo en obsesión.

Entonces, ¿por qué te exaltaste un poco cuando te dije que él es mi hermano?

Es una historia un poco larga y es algo muy personal. Lo lamento.

Disculpa por ser tan descortés. Sé que no me conoces y ya ando preguntando de más.

¡Está bien!

Antes de despedirse, ella me mira con unos ojos verdosos que me hipnotizan por unos segundos. De sus hermosos labios logro escuchar:

Encantada de conocerte, Francesco.

Antes de irse, la agarro por el brazo izquierdo y le hago unas preguntas un poco inapropiadas para ser el primer encuentro:

¿Irás al baile?

Sí.

Yo también iré. ¿Te gustaría acompañarme? A menos que tengas con quién ir.

ANNA:

Los hermanos Blake parecen obras de arte; no hay desperdicio alguno. Primero está John, que es un coqueto en todo su esplendor, y luego Francesco; maduro, dócil y sexy.

La propuesta no está nada mal, pero todo esto sería un poco extraño. Total, solo somos dos desconocidos.

Francesco, te aseguro que cualquier otra chica estaría encantada de ir contigo. Es que todo esto es un poco extraño, ¿no lo crees?

Arriesgarse es de valientes; si no lo intentas, jamás sabrás si funcionará.

Este chico me sorprende; sus palabras son muy convincentes y reflexivas.

Mira, pasa por mí a las 7:30 p. m. Y lleva esto pendiente: no te enamores, chaval. Tampoco te me insinúes, que estoy en una etapa vulnerable con mis hormonas. Te doy la oportunidad de ser mi amigo.

Francesco empieza a reír por mi comentario y se pone muy feliz de acompañarme al baile.

ALEX:

¿Y si volvemos a encontrarnos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora