༺PRÓLOGO༻

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Una chica castaña de cabello liso y largo vestía un pantalón jeans y blusa rosada con un pequeño moño en su cuello y zapatillas del mismo color de su blusa bajaba las escaleras de su mansión a toda velocidad. Se había dormido lo que ya daba por perdida la primera clase por suerte sus padres estaban de viaje y no se enterarían porque si lo supieran la que le esperaba.  

Señorita Helen el desa.. — menciona una empleada

Voy tarde pero prometo comer doble porción en la tarde — se excusó saliendo a toda prisa de su hogar.

Busco las llaves de su auto en su cartera y al encontrarlas activó la alarma para quitar el seguro. Abrió la puerta, se colocó el cinturón y lo encendió para salir del lugar y dirigirse hacia su universidad.

Mientras viajaba recibía una llamada y al ver de quién era no dudo en contestar.

¿Se puede saber porque
no te vi en la primer clase? 

¡Ya Hane! Me dormí, lo siento.

¡Mi dirmi!, esa no es excusa Helen

Estoy cerca ya llegaré

Si a cerca te refieres saliendo de tu
casa, mejor iré preparando tu excusa.

La castaña solo rio un poco.

Deja de reírte o le diré a tus padres 

El semblante cambio a uno indignado.

Tampoco amenaces, enserio ya llegaré.

Sin dejar que dijera algo más colgó la llamada y presionó un poco más el acelerador para llegar al menos a inicios de la segunda clase que sería en unos quince minutos.

Sin dejar que dijera algo más colgó la llamada y presionó un poco más el acelerador para llegar al menos a inicios de la segunda clase que sería en unos quince minutos

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La chica corría por los pasillos desiertos sosteniendo su cartera en su hombro para llegar al aula 213 ya que quedaba en el segundo nivel de la universidad. Estaba retrasada por cinco minutos pero su amiga Haneul le comento que la licenciada aun no llegaba asi que tenia ventaja.

Al estar cerca del aula tomó un breve respiro apoyando sus manos a sus rodillas para recuperar un poco de aire y calmarse. Sentía que no podía correr más. 

Con las fuerzas que recuperó camino hasta estar frente a la puerta donde la encontró cerrada. 

Pero que.. — toco la puerta extrañada de verla cerrada pues solo indicaba que el maestro ya había llegado. A los minutos se abrió donde una mujer delgada con anteojos la miraba seria, Helen solo sonrió nerviosa y dio una leve reverencia hacia su maestra.

Disculpe por llegar tarde pero es que mi auto no encendía — mintió mientras sonrió de forma inocente bajo la atenta mirada de la mujer. 

Señorita Shin usted es una de mis mejores y brillantes estudiantes — la joven solo escuchaba atenta e impaciente pues sus piernas en cualquier momento flaqueaban de lo cansada que estaba de correr. — Por esta vez permitiré que entre a mi clase pero si se repite no solo la reportare para que lo coloquen en su expediente, también se lo diré a sus padres.

𝑬𝒍 𝒄𝒉𝒊𝒄𝒐 𝒅𝒆𝒍 𝒕𝒓𝒆𝒏 • 𝑱𝑱𝑲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora