Parte uno

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Las miradas eran curiosos en las personas presentes en ese momento, excepto por uno, que se encontraba con el ceño completamente fruncido, con las manos atadas con cadenas y apunto de explotar de tanto enojo que estaba acumulando.

—¿Por qué no secuestramos a Izuku?, el hubiera sido mejor.

—No lo necesitamos, era mejor secuestrarlo a el, es el indicado para estar aquí.

—¿Son imbéciles, verdad?, puedo escucharlos.

El peliceniza gruñó en el momento, comenzando a forcejear las cadenas para poder crear explosiones.

—Bakugo Katsuki, únete a nosotros.

—Estoy hace 12 horas con estas cadenas de porquería, ¿Por qué aceptaría esa estúpida propuesta?

—No exageres, simplemente esperamos que te unas a nosotros y derrotar a all might.

El peliceleste liberó al menor, soltando las cadenas casi inmediatamente y notando como se masajeaba las muñecas mientras se quejaba levemente.

—Eres débil.

—Me importa un carajo lo que creas, ¿Piensas qué al decirme un par de palabras estúpidas me uniré a ustedes?

—All might no vendrá por ti.

Escuchando como el ojirubi soltaba un quinto suspiro seguramente, llevaban diciendo lo mismo hace nueve horas, para el no tenia sentido lo que decian, ¿Por qué all might no vendría por él?, sabia que el aparecería en cualquier momento.

—¿Me dirás también que has conocido a la reina de Roma?

—¿Por qué no nos crees?, el no vendrá, todos en la UA saben que perteneces al lado de los villanos.

El de cara oculta acababa de decir eso, Bakugo simplemente pudo mirarlo y reir leve.

—Idiota, tú ocultas tu rostro por estúpido y nadie opina, all might vendrá y les pateara el culo.

Shigaraki parecía rascarse su nuca con algo de desesperación, llevaban horas diciéndole a aquel muchacho que el héroe número uno no vendría a salvarlo y el seguía insistiendo en aferrarse a esa idea de que lo salvarían.

—Eres débil.

—Ajá.

—Todo te odian.

—No me importa.

—Izuku esta mejor sin ti.

—A nadie le importa ese bastardo.

—Eres una basura de persona.

La única chica que se encontraba allí estaba cerca del peliceniza, diciéndole cualquier mierda que se le cruzará por la cabeza.

Bakugo en un momento volteó a sentarse en aquella silla de metal donde anteriormente estaba encadenado, soltó un suspiro mientras intentaba mantener la calma.

—Kirishima es tu amigo, ¿Verdad?, el seguramente esta más que feliz sin ti, esta tan feliz de dejar de fingir ser amigo de un monstruo.

—Cállate, maldita rata.

—Toga tiene razón, ellos ni siquiera te querían como amigos, simplemente les gusta fingir ser amables con alguien tan asqueroso ya que serán "excelentes héroes".

Tomura esta ves se había metido en la conversación, notando como el contrario se quedaba completamente callado y pensativo.

—Ellos son mis amigos..

—¿Estás seguro?

—¡Claro que si, maldito!

Esta ves el tono de voz del joven no sonaba tan enojado como antes, ahora había una leve confusión en el.

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