Avada Kedavra//Parte 6 de Harry Potter y Siete Años de Caos.

Capítulo 11 : "¿Cómo es capaz Harry de causar tanto caos en tan poco tiempo?"

Septiembre 1

Severus ni siquiera llegó a su cama después del banquete cuando comenzó el caos incontenible de Harry.

—¡Profesor! ¡Profesor! —Theodore lo llamaba desde la puerta de su habitación privada—. ¡Por favor! ¡Despierte! ¡Es Trent!

Severus se puso de pie y llegó a la puerta en tres largas zancadas. En cuanto abrió la puerta, Ronald y Theodore llevaron a Trent Bailey a su habitación y lo depositaron en un sofá.

—Está herido y no queríamos utilizar a los sanadores de Slytherin —dijo Theodore como una explicación apresurada de por qué un niño ensangrentado y herido estaba sentado en el sofá de Severus—. Pensamos que o lo traeríamos aquí ahora, o Harry lo arrastraría aquí de todos modos.

—Estoy bien —protestó Bailey débilmente. Severus lo ignoró y se dedicó a lanzar un hechizo de diagnóstico y ordenarle a Ronald que explicara lo que había sucedido.

A diferencia de Theodore, Ronald era un mentiroso terrible, lo que lo convirtió en la primera opción de Severus para todas las explicaciones.

—Crabbe y Goyle lo desafiaron, señor —dijo Ronald inmediatamente—. Le rompieron las costillas y lo golpearon con un Crucio durante más de un minuto.

—¿Por qué? —preguntó Severus con curiosidad, ya que el informe de diagnóstico del chico coincidía con la historia de Ronald. No era extraño que los estudiantes mayores desafiaran a los más jóvenes en la noche de duelo de Slytherin, pero no podía imaginar cómo alguien podría sentirse ofendido por Bailey. Convocó una poción de regeneración nerviosa y un analgésico y se los dio a Bailey—. Bébelos, luego curaré tus fracturas.

—Gracias —murmuró Bailey, con las mejillas rojas y los ojos húmedos.

—Querían meterse con Harry —dijo Theodore con el ceño fruncido—. Llamaron a Trent sangre sucia. Harry les dijo que los mataría si lastimaban a Trent, pero como Trent no lo rechazó y ellos tampoco se acobardaron...— Theodore se encogió de hombros. —Probablemente Harry los esté matando ahora mismo.

—Probablemente —convino Severus. Se quitó la agitación de los hombros mientras debatía rápidamente consigo mismo. Tenía una regla de no intervenir en los duelos internos, ya que eran una especie de derecho de paso a Slytherin, pero tampoco podía permitir que Harry comenzara el año escolar con un doble homicidio.

—Señor Bailey, voy a curar sus fracturas ahora —dijo Severus, priorizando rápidamente—. Exhala, muy bien, brackium emendo.

Bailey dejó escapar un grito silencioso cuando sus huesos volvieron a unirse y luego suspiró aliviado—Gracias, profesor— dijo cortésmente. Bailey se puso de pie y estiró los brazos sobre su cabeza—Me siento como nuevo ahora—sonrió—Perdón por molestarlo.

—No es ninguna molestia —dijo Severus mientras convocaba su botiquín—. Vengan, los acompañaré a todos de vuelta a su dormitorio.

Los chicos siguieron obedientemente a Severus, aunque fueron detenidos a mitad de camino por la aparición de Harry.

La apariencia empapada de sangre de Harry .

—¿Los mataste? —preguntó Severus con vehemencia.

—No lo sé. Espero que sí. —Harry miró alrededor del pasillo vacío antes de hacer un gesto con la muñeca y colocar un amuleto de privacidad—. Sin duda, les he quitado un par de tatuajes. Pensé que te gustaría saberlo.

Tatuajes.

Crabbe y Goyle.

Severus apretó los dientes con ira.