four seasons Ꮺ jensoo

O43.

Antes de continuar con la lectura, me gustaría dejar un mensaje que dejó el autor original sobre un tema que considero pertinente para entender los capítulos pasados y los que se verán de ahora en adelante.

Advertencia: Charla larga.

Así que, bueno, hablemos de punitivismo y castigo.

¿Qué es el punitivismo?

Es una palabra que suele usarse como una crítica desde sectores de izquierda (mayoritariamente) hacia las penas de cárcel o castigo como una forma de solucionar los problemas sociales. En lo básico, es esperar que todas las personas que se salen del margen correcto que la sociedad espera, vayan a la cárcel o reciban un castigo para pagar por el delito cometido, a la espera de que esto los haga recapacitar y después se reintegren a la sociedad como "ciudadanos de bien". El debate de esto se centra en la enorme distancia entre la teoría y la realidad. La teoría dice que la cárcel/castigo funciona. La realidad es que la cárcel y los castigos no reinsertan, sino que acrecientan la violencia.

Desde una mirada feminista, no es un tema nuevo, pero que SÍ parece haber sido olvidado. El antipunitivismo y la abolición de cárceles (cuando se habló por primera vez de ABOLICIÓN en el feminismo), se puede rastrear hacia algunos feminismos de los 70. Por ejemplo, para Angela Davis, es un tema central que debe ser enfrentado. No se busca que el sistema judicial no intervenga, pero sí entender que la violencia machista-patriarcal se fundamenta en una sociedad que oprime a mujeres y feminidades. Bajo esta realidad, ‹‹es la sociedad el caldo de cultivo de estos supuestos "monstruos", que no son más que hijos sanos del capitalismo patriarcal y racista››.

No, no se le está quitando peso a la acción ni justificando la agresión, pero sí se critica la forma en que dicha agresión es enfrentada. Privatizar la responsabilidad es ignorar la realidad que como sociedad sufrimos, y no centramos el "castigo" en la reparación, la educación y la prevención respecto a la violencia machista.

Son muchas mujeres que han hablado de esta realidad, y sobretodo, que el feminismo se está convirtiendo en un feminismo de carácter punitivo. Por ejemplo, Alexandra Kohan se refiere a esto como ‹‹el punitivismo pretende soluciones rápidas, un reforzamiento del no querer saber. Es una forma de querer expulsar del mundo aquello que alguien considera dañino. Es un modo que termina practicando la segregación y la anulación del otro como sujeto. (...). Más que una forma de justicia, es una forma de venganza. Es, además, un dispositivo de terror que va cerrando bocas››. O Rita Segato, que comenta que ‹‹¿puede el punitivismo, frente a la impunidad, ser una forma de "justicia popular"? La antropóloga expuso que hay que tener "cuidado con las formas que aprendimos de hacer justicia" desde lo punitivo, que están ligadas a la lógica patriarcal. El desarrollo del feminismo, resaltó, no puede "pasar por la repetición de los modelos masculinos"››.

Menciono esto, porque también está esa mirada de que "es un hombre, los hombres no pueden cambiar". Y ya, puede que muchas lo digan de chiste, pero yo sé que hay muchas mujeres feministas que piensan así. Honestamente, veo un serio problema con eso, porque si los hombres no pueden cambiar, no pueden ser educados, no pueden ser rehabilitados, entonces... Entonces el feminismo no tiene esperanza alguna de funcionar, pues estamos dando por sentado que la sociedad siempre va a ser patriarcal.

Y sobre el castigo...

Sé que muchas personas hemos pensado en eso. No voy a negar que yo misma pensé, en variadas ocasiones, que las personas que se salen del "buen camino", cometiendo un robo o asesinando deberían, en realidad, irse a la cárcel o morir. O reírme de cuando los ciudadanos logran detener a un delincuente y, aprovechando que la policía no ha llegado, deciden ellos mismos un castigo para enseñarle una lección. O, incluso, sentirme feliz de que un violador vaya a la cárcel porque sé que allá será violado también. Y sé que eso lo piensa, también, toda la sociedad, porque es la forma en la que hemos sido educados.