II | 30 days without accidents

16 1 0
                                    

Pasaban los días y todo pareciera que iba tornándose con un futuro muy prometedor para todos. Se realizaron varios grupos para poder limpiar más zonas de la prisión, tardándonos alrededor de cuatro días en limpiar por completo otro edificio más donde se encontraban varias oficinas sin mencionar las celdas que habían en los pisos de arriba.

En esta ocasión nos habían dejado participar a Carl y a mí, siendo el castaño el más emocionado ante esta nueva actividad. Cuando terminamos nuestras tareas diarias volvieron, ya era un poco tarde; más de medio día.
La guardia le tocaba a Carol y Carl así que yo estaba junto con los Kinkle afuera, hablando para conocernos mejor.

Ben era mayor que Mae por un año, su madre había muerto mientras se sacrificaba por ellos; parecer ser una nueva moda de las madres hacerlo. Su padre murió poco después de su llegada a Woodbury, siendo ahora huérfanos, otra cosa en común que los tres teníamos.
Y que vivían en Atlanta, supongo que todos nos tuvimos que mover para poder sobrevivir.

Para que la prisión funcione todos debemos aportar algo a este lugar, así que las tareas se fueron asignando a más personas y algunas cambiaron de tareas por lo mismo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Para que la prisión funcione todos debemos aportar algo a este lugar, así que las tareas se fueron asignando a más personas y algunas cambiaron de tareas por lo mismo. También se creó el consejo donde participaba Rick, Hershel, Michonne, Daryl, Glenn, Maggie y Matt.
Más personas se las asignaron el estar vigilando las cercas, habiendo más turnos y más gente matando a los caminantes que se acumulaban.

Con respecto a nuestras relaciones con los demás, Beth inició una relación con Zach.
Carl hizo amistad con Patrick que fue más obligado por su padre que por voluntad propia, no tenía opción con Ben y Mae ya que ambos pasaban la mayor parte de su tiempo libre conmigo.
A lo que a mí respecta me he sentido cómoda con los Kinkle, son una gran compañía.

Ahorita me encuentro alistándome ya que convencí a los Scratch para que me dejaran salir, no fue una tarea fácil convencerlos. Sin embargo Carl no estaba de acuerdo.

— No vayas. — Dijo Carl serio desde la puerta de mi celda.

— Carl, no está en discusión, voy a ir. — Dije cerrando mi mochila.

Carl suspiró. — Por favor, no quiero que te pase algo. —

— No me pasará nada, nunca me ha pasado nada. —

— Natalie por favor, no quiero que vayas. —

— Pero no puedes decidir que puedo hacer y que no, si mi padre y mis hermanos están de acuerdo es más que suficiente. —

Me parece enfrente de él mientras colgaba mi mochila, su cara reflejaba preocupación y enojo.

— Sabes muy bien que no es seguro, si te llega a pasar algo de nuevo no me lo perdonaría. —

El castaño se acercó a mi posicionando su mano en mi cintura mientras acariciaba mechones de cabello que estaban en mi cara.

— ¿De qué hablas? — Pregunté confundida, dándome a entender que me había pasado algo.

Next to you | Carl GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora