La luz en mi cara me molesta-¿Dónde rayos estoy?-siento una mano que está tocando mi espalda-¡Por favor que no haiga hecho una locura!-me doy la vuelta lentamente para ver.
Suspiro al ver a Vanessa dormida casi que encima de mí, me levantó camino al baño a lavarme los dientes salgo a la cocina a buscar algo de comer al abrir los cajones de la cocina hay cereales.
- Bueno es mejor que nada -susurro.
Tomo uno de bolas de chocolate abro el refrigerador para ver si hay leche y no hay.
- Cera entonces cereal solo -digo entre dientes.
En el refrigerador solo hay gaseosas tomo una me voy al sofá, enciendo la televisión.
- ¡Qué hora es!? -dice Vanessa gritando desde la habitación.
- Ni idea, no sé dónde he dejado mi celular -
Solo oigo como se queja no puedo evitar reírme, escucho sus pasos por el pasillo acercándose a dónde estoy.
- No tienes una Aspirina en este lugar Mónica -
Se tira en el sofá que está desocupado suspira admito que su resaca me algo de gracia.
- ¿Porque tú no te ves tan mal como yo lo estoy ahora? -
- Hace una semana me pasó lo mismo que tú -
- Y que me importa eso, ¿Porque ahora mismo no te sientes como yo? -
- Porque comí, bebí agua y antes de dormir me tomé una Aspirina al igual que está mañana al despertar -
- Eres una egoísta -
Suspira, se levanta va directo a la habitación puedo escuchar como busca las Aspirinas.
- ¡Dónde estás las malditas pastillas! -
- En el cajón del baño -
Busco mi teléfono se que lo dejé ayer en algún lugar del sofá, muevo los cojinesy al verlo lo tomó, al ver la hora son las once de la mañana.
- Todo lo que necesitaba era una Aspirina -
- Creó que ya me debería ir -
- ¡No!, hoy es sábado hay que salir otra vez -
- Quiero ir a la oficina a ver si mi jefe ya revisó algunos papeles que le dejé pendientes -
- Pero quédate, si él te necesita vas pero si no te necesita podemos salir el día de hoy -
- Está bien solo porque ya es tarde para ir a la oficina -
- Genial, deberíamos ir a la peluquería y después a un spa -
- Yo no voy a pagar nada -
- Tranqui amiga, yo pagaré -
Ambas nos reímos, terminamos de comernos la caja de cereal que tenía junto con unas gaseosas.
- Deberíamos viajar al tiempo hoy -
- ¡No! -
- ¡Si!, yo tengo veinticuatro años y tú tienes veintiuno nadie nos va a castigar está vez -
- Si pero si asemos algo ilegal nos pueden llevar a la carcel está vez no vas tener la escusa de que eres menor de edad -
Vanessa se rió y solto una carcajada que le salieron lágrimas de los ojos su risa hizo un efecto en mi que yo también reí.
- No puedo creer que lo te hallas olvidado de aquella pelea -
- Mis padres me castigaron por un mes nunca lo voy a olvidar -
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Trato De No Asociarme
Teen FictionDespués de tantos disgustos y tener que soportarlo al fin me librare de él solo tengo que cumplir con el acuerdo aunque eso no fue suficiente tengo que hacer que firme un contrato porque no confío en su palabra ¿Que puede resultar mal fingir ser una...