#Maki

36

¡Bingo! De nuevo en Midgard, pero esta vez había presencia sobrenatural... una mujer que puede ver a los muertos, hablar con ellos y escucharlos. En esta realidad se llama Thomas y resulta ser tan encantador como ella lo conocía. No era como que Malie lo conociera a profundidad y de mucho tiempo, así que su opinión no era muy confiable. Quiere hacerle una propuesta de trabajo y el padre de la joven lo rechaza. Salen al baile donde fue el padre y amigo de la joven, Thomas le presenta a Lucy, su hermana. Malenalie quedó encantada, usó la ilusión de Loki para volverse invisible e intentó tocarle la mejilla y su barbilla partida.

—Dijimos que no.

—Bueno, sigamos... No me dijiste que sabías bailar.

—Un príncipe debe saberlo.

—Enséñame— murmuró sobre sus labios mientras el dios les cambiaba la vestimenta—. El rojo no es mi color.

—Resalta tu figura.

—Y tú no te ves nada mal.

—Ya sabes quién resalta más de los dos— por fin se besaron.

Así como ese Loki, o Thomas, y Edith bailaban, Loki yMalie se estrecharon ybailaron al son de la música, la pelinegra se sentía flotar en la habitación, entre los brazos de su dios. Se quedaron hasta que la velada terminó y custodiaron la partida de Edith hasta su residencia. Al día siguiente, acompañan a los hermanos cuando el padre de Edith, le da un cheque para que le rompa el corazón a la chica y se vaya lejos. Al tercer día, estos jóvenes se reencuentran y se juran amor. Luego del placer, venía el sufrimiento, pues ella es informada de la muerte de su padre.

Pasan unas semanas antes de irse a Inglaterra. Al llegar a la casa, descubre por qué le dicen La Cumbre Escarlata a esa mansión. La joven vuelve a ver sombras, ve una sombra y la persigue, al no dar con ella, se convence de que es Lucy y su cuñada le dice que no debe temer a las sombras porque es lo que habita mayormente en la casa. Durante la noche, mientras se daba un baño, volvió a ver la sombra y esta la estudiaba. En el pasillo ve otra vez la sombra, y la persigue, Edith huyó al sótano y descubrió un par de cosas que fue a cuestionarle a su esposo.

—Ya lo dijo Edith, eres todo lo que tengo. Esa es una constante.

—La diferencia es que yo soy un dios, criatura tonta.

—Y yo una magnate de negocios, una chica playboy, una ex militar, una mutante y ahora tu novia.

—Esposa.

—¿Esposa?

—Te pondré el anillo cuando hayamos terminado con estas misiones.

—Hecho— Malie besó su mano, la misma que Edith le curó a Thomas.

De nuevo, Edith tiene pesadillas y esta vez está más alterada por las visiones que tuvo, Malenalie rompió la promesa y tocó la frente de la rubia durante sueños para conocer sus pesadillas, los demonios que las atormentaban. Lucy la veía como si estuviera loca mientras lloraba desesperada y contaba los hechos. Los recién casados pasaron la noche en el pueblo y los venidos de otra realidad sonrieron al saber qué pasaría a continuación. La pelinegra le hizo ojitos y bailó las cejas, el pelinegro rio y negó. Ya habría tiempo.

Edith descubre que había cartas, había esposas, había cuerpos. La rubia descubre que la estaban envenenando, por eso decide ya no beber el té, pero Lucy le pone el veneno a la comida. Edith descubre que Thomas y Lucy estaban juntos y de la forma más casta posible, Malie puso cara de asco y vio a su interlocutor, este negó. Alan intenta salvar a Edith y Lucy lo apuñala, Thomas lo esconde para ir a salvar a su esposa. Lucy descubre que Thomas en verdad se enamoró de la joven, así que mata a su hermano.

La rubia le saca la ventaja y llega hasta el sótano en busca de su amigo. Ambos buscan huir de la mansión. Lucy y Edith van al exterior y empiezan a pelear, Malie siente aún más asco cuando ve a la hermana tomar el cuchillo por el filo sin ningún problema, eso sí era compromiso y demencia. Nadie se iba a rendir, Lucy se distrae con el fantasma de Thomas y Edith por fin logra matarla. La rubia se despide de su esposo antes de que desaparezca el fantasma de su esposo.

—Eso fue horrible.

—Asqueroso.

—No tengo una hermana con la cual engañarte.

—Ya son tres de tres, ¿puedo dudar?

—No, ¿yo puedo dudar de tu enorme cercanía con el hombre de metal?

—¿Tony? No, él babea por Pepper, ni siquiera saliendo en el calendario de Playboy logré que se fijara en mí.

—Auch, ¿cómo ignoras esto? — la hizo girar sobre sus talones.

—Tú lo hiciste.

—No, te dije que esperaras.

—Ese plan fue demasiado elaborado, ¿qué tan desequilibrado mental debes estar para lograr eso? Digo, Lucy atormentó a todas esas mujeres, mató a esas mujeres, a su madre, a su padre. Torturó psicológicamente a su hermano. Al menos yo no podría hacerte eso, yo jamás voy a dañarte.

—Me preocuparía si te parecieras a Lucy, pero eres más soñadora y dura como Edith.

—Y tú tienes el encanto de Thomas, sigues siendo guapo, atento, decidido... y espero recibir el mismo amor.

—¿Crees que no podré?

—Y quiero un perro.

—No.

—Por favor.

—No.

—Ay, por favor, tendrá dónde correr, muchos árboles para marcar.

—Este es el único lugar habitable, no hay un perro allá afuera para traerte, no hay un supermercado. Fuera de este domo imaginario, sólo hay tumbas, ni siquiera fueron enterrados los cuerpos, la guerra se llevó todo. Este lugar es lo único que puedo ofrecerte y ni siquiera es mío. Es tuyo.

—Es nuestro.