En la era en la que vivimos, casi nunca somos plenamente conscientes de las que nos precedieron, ni de las que sucederán.
Eras llenas de historias, algunas contadas, otras muchas olvidadas. Intuidas a veces únicamente entre las piedras olvidadas del mundo, como criaturas fantásticas que esperan, fieras amenazantes esculpidas entre los muros desgastados de los antiguos templos, a los que pocos ya prestan atención.
Testimonio de una riqueza perdida de otros tiempos en los que, quizá, sólo quizá, algunos niños aún observan con ojos desmesuradamente abiertos.
Esta historia comienza en una de aquellas eras.
A través de ella, quien sepa, podrá descubrir entre sus líneas la verdad y la fantasía.
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Descubriendo Alasdain
Romance"Miró dentro de los ojos de ella, ahora frente a los suyos. Eran brillantes, de oro. El dolor se hizo intenso, insoportable, y el cuerpo de Beril comenzó a ceder, cayendo entre los propios brazos de su enemiga, que no lo soltaba. Quiso alejarse de e...