𝐁𝐥𝐨𝐨𝐝𝐲 𝐌𝐚𝐫𝐲→𝙼𝚞𝚣𝚊𝚗 𝚡 𝙾𝙲 𝚐𝚒𝚛𝚕

0.7 "𝑀𝑖𝑟𝑎𝑑𝑎𝑠 𝑓𝑖𝑙𝑜𝑠𝑎𝑠"

"𝐸𝑙 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜 𝑐𝑟𝑒𝑒 𝑒𝑛 𝑠𝑖 𝑚𝑖𝑠𝑚𝑜 𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒"

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   Tras la conversación Mizuki insistió en ir a buscar comida , Muzan tenía todas las ganas de negarse pero ella lo obligó a ir por unos onigiris , en el puesto ella pidió varios, le ofreció a Muzan pero el se negó así que ella comió con hambre  hasta acabar y pedirle que fueran a ver los fuegos artificiales a una pendiente cercana.

— Por cierto Reed disculpa mi entusiasmo— Mizuki lo miro con sus ojos brillantes a penas estuvieron solos en el lugar.

— Es la primera vez que vienés a una feria, es normal no voy a juzgarte por eso.

—¡Quien diría que eres un caballero en toda la palabra! — dijo riéndose.

  Muzan la miro pensando que ya era prudente matarla, ya le estaba colmando la paciencia pero simplemente no lo hizo, no porque le tuviera aprecio si no porque ella comenzó a hablar tan animadamente que no lo arruinó, de forma repentina el cielo nocturno se inundó de fuegos artificiales  , miro como Mizuki borraba su sonrisa y en sus ojos llorsos aparecía un brillo de añoranza.

— Si fuese a morir, quisiera haber visto más cosas hermosas— lo que dijo fue tan acorde a lo que estaba a punto de pasar que Muzan se quedo paralizado— Quiero ver más cosas bonitas.

— Tienes pensamientos extraños.

  Muzan desistió de la idea de matarla solo se quedó de pie mirándola sin entender cómo una humana era tan curiosa, desde que cayó en su trampa supo que era extraña pero no creyó que todo de ella fuera tan exuberante y lo sacará tanto de quisio.

— Gracias por ser mi amigo— dijo al final ella— Es decir, pude venir con mi compañero pero se que me daría un regaño de lo peligrosa que es esta aldea de noche y más si no tengo arma, pero tu haz sido más o menos amable conmigo desde que te conoci aunque yo parecía una loca.

— No me des las gracias— Dijo. Molesto.

  O tal vez debería por no matarla y tirarla a los perros ahí mismo.

— ¿Como planeas matar a Muzan?

— Estoy entrenando mucho así que espero conseguirlo, soy bastante fuerte en realidad.

— ¿Estas en la sede de los cazadores de demonio?. — pregunto mirándola ella sonrió y asintió— Me pregunto qué tendrán planeado para matarlo.

— Cada uno va muy por su lado en realidad— sin saberlo le dio información clave — Aunque se que se pondrían en perfecta sincronización para pelear no son necesariamente amables los unos con los otros, no se odian pero es extraño.

— ¿A que te refieres con extraño?.

— Nada en particular, algunos se llevan bien y otros no se toleran y bueno Tomioka no es muy querido pero al menos encontré amigos ahí.

— Creo que mencionas te a un tal Tajiro.

— ¡Asi es precisamente! — se vio emocionada — Es grandioso lastima que no e podido conocer a su hermana.

   Muzan prefirió no indagar demasiado debido a que ya lo había hecho.

— Ahora si me dirás como conoces mi poder— ordenó mirándolo con ojos filosos.

    Un escalofrío recorrió el cuerpo del demonio al ver a la chica mantener un rostro tan serio y desafiante como si ella fuese la reina del mundo.

— Te di información— dijo altanera — para complacer tu curiosidad ahora haz lo mismo.

   Vaya que quedó impresionado, pensó que solo era una tonta que decía cosas importantes a la ligera pero lo engatuso hasta obligarlo a decir algo.

— Solía pertenecer a un sitio asi— mintio descaradamente.

   Mizuki claro que lo noto, a pasos lentos se acercó moviendo su cabello en el aire con gracia divina, manteniendo una sonrisa de perversidad y una mirada tan filosa que parecia cortarlo mientras avanzaba, se detuvo frente a él y sus manos hermosas y delicadas tocaron su pecho paseando la punta de sus dedos hasta su cuello  y luego a sus mejillas.

  Muzan quedó estático hechizado por los movimientos sintiéndose desorientado cuando las manos de esa mundana humana lo tocaron, estaba cálida incluso sobre su ropa, nunca se había sentido tan acorralado como cuando esos ojos grises lo miraron con astucia desde abajo.

— Mentiroso— dijo apretando sus dedos en las mejillas del demonio— Dame una buena respuesta antes de que te rompa la cara.

— Que clase de estúpida eres maldita — se quejó retrocediendo estallando en furia.

   
   Retomo la idea de matarla y a eso iba pero ella sonrió más, entonces noto que no podía moverse, noto la gota de sangre que caía de la nariz de ella y aquel rosario de plata brillar con fuerza.

— Escape de los cazadores— la respuesta lleno a Mizuki de curiosidad— Luego de un accidente escape de la sede pero antes estaba obsesionado con el poder así que aprendí todo lo que pude así fue como oi de eso— era otra mentira pero mucho más elaborada y dicha de la manera correcta para ser creíble.

   Ella sonrió con amabilidad de nuevo y retiro sus manos para limpiar la mancha de sangre con cuidado.

— Lamento eso Reed pero odio las mentiras— Mizuki sonrio— y tenía la sensación de que preferirías irte corriendo a contestar con la verdad.

— No vuelvas a tocarme nunca mas— ordenó furioso.

   Mizuki en arco una ceja pero sólo asintió.

— No soy estúpida , se que hay algo raro, estas buscando información y a penas  me viste supiste que podía contarte algo— Muzan ahora la miro más fastidiado— Te traje aquí porque quería saber si al obtener la información que quieres vas a matarme.

— Como si fueras a decirme algo.

— Como si me importaran esas personas como para no desirtelo— ironizó ganándose la mirada asombrada de Muzan— ¡Ja pero! Que tonto que eres, vamos ellos me están dando la oportunidad de entrenar para arrancarle la cabeza a Muzan no quiero que les pase nada.

— Crei que dijiste tenerle aprecio a  Tanjiro.

— Y no menti, no diré nada que pueda perjudicar los porque me guste o no estamos del mismo lado, eso me lleva q preguntarme la razón de querer información.

— Nada en especial— dijo relajando un poco sus facciones— Vivi ahí aunque ya no soy bienvenido, también quiero matar a Muzan.

— Entonces ya no te odio tanto, prometo no hablarle de ti a nadie si prometes que dejaras de tratar de sacarme información.

   No iba a prometerle nada a una maldita humana, menos q ella que creía que mirándolo de forma amenazante podía lograrlo.

— Lo prometo— se escuchó diciendo antes de quejarse.

— Genial Reed entonces nos vemos luego.

— Espero que eso sea nunca— fue honesto de hecho haciéndola reír.

— Se que lo harás.

   Y ella animadamente se fue por el bosque tarareando una canción mientras Muzan deseaba asesinarla la próxima vez que la viera, el demonio suspiro cansado y llevo su mano al bolsillo de su chaqueta, quedó paralizado en su sitio al ya no sentir el frasco con el fármaco que tanto le costó conseguir, mientras a lo lejos  una sonriente Mizuki jugaba un un frasco se vidrio en sus bonitos dedos.