Por Siempre Incorrecto

CAPÍTULO 18

Sia P.O.V 

Mastico con más fuerza mi goma de mascar, como si ella tuviera la culpa de mi enojo, plasmo una sonrisa certificadamente falsa en mis labios, mientras le tiendo el catalogo de telas a mi jefe. La bomba sensual de Brasil, es todo lo que no soy, larga y voluminosa melena negra, curvas por todos lados, unos ojos exóticos, Dios Mio es tan jodidamente perfecta. 

Bueno al menos físicamente por que su personalidad es una mierda. 

Veo a uno de los asistente acercarle una botella de agua, la cual mira con repugnancia, y le grita que no es EVIAN como la había solicitado con anticipación, joder con la gente mimada. 

Lo más molesto de la situación es que la conozco, es el rollo constante de Aiden, la he visto en algunas fiestas familiares, y en algunas fotos de eventos. Ay señor, no es como si fuera la primera amiguita suya que me topo, la rubia con la que lo vi una vez en el bar, también salió de aquí, modelos, le encantan las jodidas modelos. 

Las inseguridades tocan en mi puerta, pero finjo que no hay nadie en casa. Como si fuera un cobrador, al que le debo dinero. 

No he hablado con Aiden, desde el lunes y es jueves. No se como avanzar con él, porque no se que decirle, o sea, no se cual es el punto de nuestra relación, o si al menos existe alguna, y bueno tampoco es que él, haya hecho algún merito para hacerlo, al único que he visto es a Nathan, que siempre tiene una sonrisa perpetua en sus labios. 

Me siento jodidamente miserable, pero me rehusó a admitirlo. 

- Mi niña, no me gusta ninguno de estos colores - Murmura Auntuan a mi lado, su gesto es de preocupación absoluta, y me dedica una mirada aburrida sobre el borde de sus anteojos - ¿Qué opinas? 

Boqueo sorprendida - ¿Me estás pidiendo mi opinión? - Me señalo algo incrédula, y sorprendida. 

- Eres a la única que le digo mi niña, estás brujas no obtienen tanto cariño de mi parte - Sonrió. Auntuan es un hueso duro de roer, pero creo que me lo he ganado. 

- Pienso que podemos usar una combinación de colores de otra carta, no necesariamente tienes que hacerle caso a Federic, la belleza no tiene precio. Y si quieren algo fabuloso, deben dejarte trabajar con algo fabuloso. 

Auntuan sonríe de oreja a oreja, creo que solo le hacia falta un empujoncito para tomar una decisión y ser un rebelde de la moda. Dos horas después, estoy de vuelta en mi escritorio, organizando el calendario de mi jefe, ya que pronto tendremos lanzamiento de colección. Muerdo el la goma de lápiz con impaciencia, hace aproximadamente la reina de la samba Olivia, tomo el ascensor hacia el piso de Aiden. 

Afortunadamente, veo a Mia acercarse con dos tazas de frappuccino de caramelo, Dios la amo. 

- Tienes una cara de tristeza, que me dan ganas de lanzarte un billete de cinco libras, por caridad. 

Sonrió y estiro mi mano para que me pueda dar la bebida - Te amo - Le digo mientras doy el primer sorbo - Quiero que sea la hora de salir, me quiero ir de aquí. 

- ¿Qué paso? ¿Auntuan te mordio? Te dije que podía ser algo gruñón - Niego con la cabeza, y juego con la crema batida - ¿Entonces?.

No se si contarle toda mi mierda, pienso que es una persona confiable. Pero me he equivocado en algunas veces. 

- Te cuento más tarde ¿Quieres ir por unas margaritas? - Mia sonríe de oreja a oreja, y me dice que conoce el sitio perfecto que tiene 2x1 para chicas. 

Le digo que me gustaría que fuéramos solo las dos, sin Channel. Me lanza una mirada extraña, pero luego levanta un hombro y me dedica una gran sonrisa, sin darle mucha importancia.