My Lord || [Creepypasta Slenderman]

Capítulo 14

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10:21 p.m.

Nancy Lavoie.

— Espérame aquí — le pedí a mi señor mientras veía a lo lejos mi casa. Lo miré con nervios y en espera de que aceptara esta decisión, no me gustaría que mi padre o alguien lo viera conmigo — Si me llegan a reconocer, no quiero qué también te estén buscando.

A pesar de ir cubierta hasta de la cara con ropa suya temía que me reconocieran. Sería un gran escándalo.

— De acuerdo, estaré atento por cualquier cosa — dijo él tranquilo mientras yo empecé a avanzar en dirección a mi casa. Tenía varios días que no había venido y eso me da a pensar tantas cosas.

¿Mi padre estará ahí?

De nuevo sentía esa fea sensación de salir corriendo en dirección contraria cuando estaba pisando en césped congelado de la casa. Mi estómago se revolvía a pesar de no tener nada dentro de él, eran unos nervios infernales y ganas de gritar por ayuda.

Tengo que hacerlo.

— Espero que esté abierto... — esperaba que estuviera abierta. Quería sacar algunas cosas que creo que me serán de ayuda al irme de aquí. Tengo mucho apego por lo que se encuentra en mi habitación.

Suspiré aliviada de abrir la puerta que lentamente moví para poder entrar, tan solo cerré la puerta detrás mío y di unos cuando adentro, inmediatamente percibí un fuerte olor a algo descompuesto y a su vez agrio.

La casa estaba hecha un desastre, todo tirado, todo revoloteado. Era como si un huracán hubiera arrasado con todo el lugar. Este gran desastre me hacía pensar en mi padre quien seguro está tan afectado por el alboroto en el que seguro soy la culpable.

No tengo tiempo para esto.

Inmediatamente fui a mi habitación e ignorando todo el desastre que me encontraba en mi camino, como de costumbre entré y cerré con seguro la puerta para preparar todas mis cosas en una mochila. Ropa, artículos, y más ropa. Sobre todo algunas prendas de mi madre que logré guardar y nunca usé por miedo a dañarla.

Mi padre ocultó la mayoría de sus cosas y también algunas prendas, yo logré agarrar un suéter color hueso que me gustaba mucho, era algo grande y sobre todo aún conservaba un aroma delicado a un bombón y a su vez a una ligera humedad.

Solo 1 mochila y 1 maleta. No llevaría más. Tampoco tenía tantas cosas pero, estaba llevando solo lo esencial y sobre todo, lo que yo he conseguido. No llevaba nada que mi propio padre me haya dado. Incluso lo que Mara me ha regalado lo llevo.

Tengo que hablar con ella...

Pero creo que solo será por teléfono, ya que estamos muy seguros de irnos hoy en la madrugada. Era lo mejor, casi no hay personas a esa hora y será mejor salir sin llamar la atención de nadie.

Antes de salir busqué un cubre bocas negro, solo así me sentiría un poco más segura de salir. Aunque aún no me lo puse.

Salí de mi habitación procurando guardar silencio, pasé por el pasillo y cuando llegué a topar con la entrada de la cocina no pude evitar verla. Sobre la mesa estaba un pastel, de ahí emanaba el fuerte olor agrio y estaba batido por parte de la mesa, como si lo hubieran aplastado.

¿Mi padre trajo un pastel?

Hace años que un pastel no pasaba tan siquiera por la entrada principal. Ni un solo cumpleaños mío o de mi padre, ni un solo pastel se había visto en esta casa.