Capítulo 24

104 12 13
                                    

•———————•༻❁༺•———————•
MESES DESPUÉS.
17 de Agosto.

12:13 p.m.

Nancy Lavoie.

Los meses han pasado tan pronto, como un pestañeo, entre risas y buenos momentos; aunque aún llueve con intensidad últimamente, han pasado días lloviendo y haciendo demasiado frío.

Pronto vendrá la nieve...

Siento una gran nostalgia, la nieve me recuerda tanto al pasado que deseo dejar atrás. Me dan ganas de salir y ver blanco en todas partes, jugar con la nieve y sentir como mis dedos se entumen del frío.

Mi mente se concentra de nuevo una vez que siento las manos de Slend acariciar suavemente las mías.

Era tan satisfactorio sentir su tacto en mí, adoraba sentirlo y pasar cada segundo a su lado.

¿Qué me ha pasado?

Me he vuelto peor que una niña emocionada, que una niña mimada y a la vez afortunada. Las dichosas mariposas de las que tanto oí hablar han surtido efecto en mí, desde hace tiempo pero volviéndose más intensas ahora por su culpa.

Es inevitable.

— Sostén firmemente el arma y respira profundamente... — escuchaba a Slend murmurar aún lado mío, su cuerpo estaba pegado a mi espalda mientras sus manos grandes estaban sosteniendo las mías que agarraban firmemente el mango del arma negra — Lo has hecho varias veces ya, solo debes controlar esos nervios... — mencionó él.

Me ha estado enseñando a disparar, fue algo que le pedí hace unos días cuando lo vi limpiar ésta misma arma. Mis ganas y la curiosidad fueron tan grandes que no evité pedírselo, él accedió sin problema alguno.

Las clases han estado siendo algo constantes, casi diarias, por lo que he ido mejorando muy rápido pero me cuesta sostener el arma, me da nervios tener algo tan peligroso en mis manos.

Me recuerda tanto cuando mi señor me defendió...

Aún recuerdo la fría nieve golpear y las detonaciones lastimar mis oídos, fue un momento sumamente extraño que me dejó cautivada. Recordarlo sosteniendo el arma sin dificultad y fríamente disparando a sus víctimas me hace sentir ahora determinada a lograr lo que sea que me proponga.

Las clases han sido en el sótano, era una parte donde solía venir con Albert a entrenar un poco, me enseñaba algunas cosas aunque era algo torpe, sentía que era algo complicado de entender pero absorbí unos cuantos movimientos. Todas las clases han sido aquí, ya que ha estado lloviendo con intensidad, así que no hemos podido salir afuera a practicar.

Era un espacio algo amplio, casi desapercibido para cualquier visitante. Contaba con algunas cosas para entrenar, sobre todo Slend lo modificó para poder disparar.

— Bien... — musitó mientras soltó mis manos cuando sintió que dejé de temblar, aunque aún estaba nerviosa y mis manos sudaban, pero ahora he logrado mantenerme quieta — ¿Ya apuntaste a tu víctima? — cuestionó refiriéndose a la botella que había colocado a unos metros para que pudiera dispararle.

— Sí — sus manos fueron a mis orejas, las tapó para que no escuchara el fuerte ruido del arma al denotar. A pesar de haberle puesto un silenciador el sonido era molesto aquí abajo por el eco que había.

Disparé sin dudar, la detonación seca fue presente y la bala dió a la botella que se rompió inmediatamente en varias piezas, finalmente había derribado mi sexta botella.

My Lord || [Creepypasta Slenderman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora