𝐑𝐔𝐌𝐎𝐑𝐄𝐒 - 𝑃𝑎𝑡𝑟𝑖𝑐𝑘 𝐻𝑜𝑐𝑘𝑠𝑡𝑒𝑡𝑡𝑒𝑟/ 𝐼𝑇

~𝑉~

-¿Que diablos haces aquí?- dije confundida.

-Vine a verte, dijiste que estabas sola y yo no tenia ningún plan así que...no tenia más remedio- dijo mientras soltaba una risa orgullosa.

-Eres un idiota- dije riéndo -Ven pasa- dije para luego abrir mejor la ventana para que Patrick entrara.

Patrick se quedó mirando mi habitación, viendo los pósters de las bandas de rock y pop en mis paredes y tocado mis libros.

-Lees mucho?- Preguntó curioso.

¿Que diablos hacía aquí si yo le caía mal? bueno eso creía, ¿Porque me preguntaba cosas? nisiquiera pensé que le podría llegar a importar.

-De vez en cuando, cuando estoy aburrida o sin nada que hacer, ¿tu lees?- Pregunté para descubrir algo de el, era muy misterioso...

-Na, no soy un nerd- respondió haciendo una mueca.

Jódete Hockstetter

No respondi nada cuando el me dijo eso,
fui hacía mi cajón y saqué un paquete de cigarrillos.

-¿Quieres Hockstetter?- dije extendiendo mi mano con un cigarrillo.

-¿Porque me dices Hockstetter, Wright?-
Preguntó soltando una risa.
-Dime Pat, yo te digo Maddy- luego de decir eso agarró el cigarrillo para ponerlo en su boca y prenderlo con su encendedor plateado.

Se veía tan lindo, había algo en él que me gustaba, pero sentía que el nisiquiera se le pasaba por la cabeza pensar en mi o algo parecido...

-Bueno, lo lamento, Hockstetter- Dije soltando una carcajada.

El solo me miró con una sonrisa cautivadora, cuando iba a prender mi cigarrillo el se acercó y me lo prendió con su encendedor, estaba tan cerca de mí, no pude evitar mirarlo fijamente a los ojos, me sentí embobada cuando me empezó a mirar los labios. El se acercó aún más, iba a pasar, iba a besarme pero...

¿Que rayos fue eso?

No pudimos evitar separarnos cuando de repente escuchamos la puerta de mi casa abrirse y escuchar un grito.

-Maddy! Ya estoy en casa!- Se escuchó en el piso de abajo.

-Mierda, es mi madre- dije para luego indicarle a Patrick que saliera por la ventana y baje silenciosamente.

-Nos vemos mañana, tonta- luego de decirme eso con una sonrisa, posó un beso suave y tierno en mi mejilla.

¿QUE MIERDA ACABA DE PASAR?!
no pude evitar sonrojarme...

-Adiós, Pat.- dije para soltarle una sonrisa y cerrar mi ventana-

Escuchaba como el iba bajando, pero también escuchaba los pasos de mi madre hacia mi cuarto.

-Hija! Estas en tu habitación?- Preguntó tocando la puerta.

-Si mamá, ya salgo, me estoy cambiando!-

Mi habitación apestaba a cigarrillo, agarré perfumes, todo lo que tenía para sacar el olor y lo logré. Si mi madre se enteraba que fumaba, seguramente me mataría.

-Hola ma- dije con una sonrisa al salir de mi habitación y encontrarla con una copa de vino.

-Hola hija, ¿Porque no comiste la comida que te dejé en la nevera- Dijo confundida y con cara extraña.