CAPÍTULO-12

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Y como la diosa que era,
sus manos recorren su cuerpo incitando así,
al demonio que la miraba con maldad,
El deseo era algo tan fuerte que los envolvía a ambos con solo mirarse.
Ya no había nada que hacer,
ambos estando en su mundo,
no dejaban de acecharse,
de buscarse,
de provocarse…
Ella se fue enamorando de su frialdad y él la fue envolviendo en su oscuridad, atrayéndola poco a poco a su infierno. Ella quería huir,
lejos muy lejos,
en el fondo algo le gritaba que lo hiciera,
pero al contrario de eso,
no huía,
si no,
que corría hacia él,
porque sin ni siquiera imaginarlo,
ella se fue enamorando de su perversión…
De él…
Y entonces Anael se fue dando cuenta de que no todos los demonios te llevan a un infierno y Legión Asmodeo entendió,
que era un simple inmortal cayendo en el embrujo de una diosa disfrazada de mujer.
.
.

 Ella quería huir, lejos muy lejos, en el fondo algo le gritaba que lo hiciera, pero al contrario de eso, no huía,si no, que corría hacia él, porque sin ni siquiera imaginarlo, ella se fue enamorando de su perversión…De él… Y entonces Anael se fue...

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YO TU DIOSA, TÚ MI INFIERNO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora