17.

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Dos horas y media después.


JungKook y Sebin bajan del coche perteneciente al pelinegro con risas de por medio gracias a las ocurrencias de la chica. Ambos pueden disfrutarse mutuamente y eso es algo que dejan a la vista de todas las personas que les miran.

- De verdad, Jeon. Casi hemos muerto con Luhan hoy. Bae Min parecía querer tirarnos con lo que tenía en mano. - Sebin murmura soltando una pequeña risa. - Pero bueno, la hemos buscado y la encontramos.

- Le doy la razón a Bae Min aquí. Ostias, mujer. Es decir, le han teñido su ropa de trabajo. - JungKook toma la mano de ella y comienza a caminar por el sendero que lo dirige hasta su casa.

- En mi defensa, yo no me acordé que el suéter de Luhan teñía a lo feo. - Se excusa. - Tuvo que prestarle una de mis chaquetillas.

- Eso es lo de menos, ¿No?- Sebin asiente. - Lo bueno es que...¿Eh?

JungKook abre la puerta y cuando se encuentra con una imagen para nada agradable, siente su cuerpo tensarse y claro está, Sebin se da cuenta de por lo que, no tarda en apretar su agarre e intentar sostener a un pelinegro muy molesto.

JungKook daba miedo así.

- JungKook, cálmate. - Le susurra y aunque intenta frenarlo. Él se suelta de su agarre.

Jimin estaba sentado en el sofá sosteniendo a Hye Kyo, quién parecía estar llorando en silencio, mientras que Yoongi intentaba hablarle de mil formas distintas.

-¿Que haces aquí?- JungKook se acerca con decisión hasta ellos, Yoongi no lo mira para nada. - Vete, Min.

Hye Kyo alza su mirada cuándo puede escuchar la voz de su padre. Ella tiene sus ojitos teñidos de temor y mucha incertidumbre.

Es decir, Yoongi llegó gritándole cosas feas a Jimin y eso no le gusta. Su tío está enfermo, no pueden tratarlo mal.

- Papá...- Hye susurra entre lágrimas y rápidamente corre hacia los brazos de su padre, quién la alza intentando protegerla. - Tengo miedo. - Confiesa.

-¿Que haces aquí, Min?- Vuelve a repetir mientras deja que Hye apoye su cabeza en su hombro. - Te pedí que te alejarás de Jimin.

- Y yo te dije que esto es un problema entre nosotros dos, en el cual tú no tienes porqué meterte. - Yoongi se acerca a él y tiene un rostro de espanto.

JungKook sonríe a medias cuando ve sus golpes.

- Sebin, ¿Puedes ir con Hye Kyo a su habitación?- Llamando a la joven, da media vuelta y se encuentra con el rostro teñido de confusión por parte de ella. - Por favor.

- Ven, cariño. Vamos. - Sin dudarlo un segundo, Sebin se acerca hasta JungKook y cuando Hye la mira, a ella se le escapa un jadeo de dolor. Odiaba ver a la niña mal. - Venga, vamos a tu habitación. He traído unos juegos para divertirnos hoy. ¿Si?

La pequeña Jeon traga con fuerzas y asiente sin decir nada. Por lo que su padre la baja con delicadeza y antes de dejarla ir, besa su cabeza.

Hye toma la mano de Sebin y rápidamente se apega a ella, quién sale casi disparada hacia las escaleras donde suben ambas para ir a la habitación de la niña.

JungKook las observa hasta que no las ve más y cuando es consciente de que ya no pueden escucharlo, se va contra Yoongi y lo toma del cuello de la chamarra que lleva puesta.

- Si no te vas en estos momentos, juro por mi madre que voy a dejarte peor. Mucho peor, Yoongi. - Le amenaza.

Su hermano, con un rostro de preocupación y tristeza, se levanta como puede del sofá y tira un poco de su hombro, por lo que JungKook conecta miradas y allí se da cuenta de cuánto Jimin está sufriendo por toda la situación.

Hey, Doctor Jeon! [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora