TN traiciona a su clan para salvar a Meliodas y Elizabeth, pero su acto heroico le cuesta caro. Maldecida por las deidades, vive con un vacío emocional que la separa de todos y una magia que destruye su memoria y vitalidad cada vez que la usa. Ahora...
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La tensión en la habitación se intensificó con cada palabra que intercambiaban TN y Golgius. Golgius observó a TN con una mezcla de burla y desprecio mientras TN se mantenía firme entre él y Elizabeth.
—No vas a tocar a Elizabeth. ¡No mientras yo esté aquí! —declaró TN con firmeza.
Golgius soltó una risa desdeñosa, su mirada enfocada en TN.
—¿Realmente crees que puedes detenerme? Esto es un juego para mí, TN. Una pieza más en el tablero.
La tensión era palpable mientras TN y Golgius intercambiaban miradas desafiantes. Golgius, con una sonrisa burlona en el rostro, no tardó en atacar. Con un movimiento ágil, lanzó un rayo de energía oscura hacia TN, que impactó con fuerza, enviándola volando por la ventana. La explosión del impacto dejó escombros esparcidos por el suelo, mientras TN caía de bruces sobre su abdomen.
Golgius aprovechó la confusión para acercarse rápidamente a Elizabeth, intentando agarrarla del brazo. Elizabeth, asustada, intentó resistirse, pero Golgius la sujetó brevemente antes de lanzar un ataque que la hizo chocar contra una pared cercana. Elizabeth, herida pero valiente, trató de levantarse, sin poder defenderse por sí sola.
TN, herida pero furiosa, se levantó con dificultad y se lanzó de nuevo hacia Golgius. Con una determinación desmedida, lo golpeó con una serie de ataques implacables, empujándolo contra la pared. La habitación temblaba con cada golpe que TN daba. Su rabia se desbordaba, y sus ataques se volvían cada vez más descontrolados.
Golgius, adolorido pero no vencido, trató de protegerse, pero TN estaba implacable. Finalmente, Elizabeth, desesperada por detener la pelea, gritó el nombre de TN.
—¡TN!
El grito de Elizabeth fue suficiente para distraer a TN, quien bajó su guardia momentáneamente. Golgius vio su oportunidad y, con un rápido movimiento, agarró a TN por el cabello, tirando de él con fuerza. Aprovechando el desequilibrio, Golgius lanzó a TN contra la pared con tal fuerza que la pared se rompió, enviándola fuera de la casa.
TN cayó al suelo, aturdida, mientras Golgius salía volando de la casa y se alejaba en la dirección opuesta. Elizabeth, con lágrimas en los ojos y el cuerpo temblando, se acercó a la ventana rota para ver qué había pasado.
La habitación estaba en ruinas, el polvo y los escombros cubrían el suelo. Elizabeth trató de mantenerse firme, pero el miedo y la preocupación por TN y Meliodas eran evidentes en su rostro.
—¿Estás bien, Elizabeth? —preguntó Hawk, que había estado observando con preocupación desde su lugar seguro.
Elizabeth asintió lentamente, su voz apenas un susurro.
—Sí, pero TN... debemos ayudarla.
Con la batalla aún en curso fuera de la casa, el grupo se preparaba para enfrentar lo que viniera mientras trataban de asegurar que todos estuvieran a salvo.
