¿Puedo Tocarte?

Capitulo 4

Regresaron juntos a casa, la discusión de Donny y Anghalhad termino cuando esta grito sonoramente ¡PUES QUIERO 3 HAMBURGUESAS CON PAPAS Y UNA MALTEADA! Luego corto la llamada de forma abrupta, no había duda que estaba furiosa.

-mujer molesta-se quejó Donny quien llevaba las compras, ya que habían pedido tanto para Anne que decidieron pedir algo más para comer más tarde todos juntos, ahora los tres le debían mucho dinero a Nasiens.

-es tu culpa por decirle gorda-hablo Percival en su habitual tono inocente.

- ¡maldita sea si fuiste tu quien se lo dijo! -le regaño furioso.

-pero lo dijiste-y Donny comenzó a perseguirlo por la calle.

Nasiens solo podía reír ante la escena, Percival era Percival y solía meterlos en problemas debido a que sus pensamientos no tenían ningún tipo de filtro, aun así sabía que Donny no estaba realmente molesto, tal vez un poco malhumorado pero no molesto, los dejo hacer sus tonterías ya que las calles a las afueras del centro no eran muy transitadas, esta era un área tranquila sin llegar a estar aislada y le gustaba vivir aquí, no mentiría, si Tristán no hubiera hecho su magia nunca hubiera podido conseguir un lugar tan bueno que le fuera posible pagar, le debía una al príncipe aunque el dijera que no es nada.

- ¡Nasiens apúrate! -vio como a lo lejos los chicos ya estaban frente a la casa.

Apresuro el paso y se unió a ellos, entraron y comenzaron a relajarse, Donny arrojo las bolsas de comida en la mesa de la cocina y camino hasta la sala donde se dejó caer en el sofá, Nasiens se puso a organizar la comida, debía guardarla para calentarla después cuando Anghalhad regresara.

-Nasiens ¿Qué te parece mi nueva bolsa? -Percival se acercó a ella y le mostro su nueva adquisición, una bolsa deportiva.

-es linda, tiene buen color-.

- ¡lo se! Por eso la elegí-dijo con una enorme sonrisa mientras iba felizmente a mostrarle como le lucia a Donny.

Nasiens no podía evitar sentir ternura cuando veía a Percival tan feliz por cada mínima cosa, aunque el fuera más alto que ella cada que algo lo hacía feliz parecía que se volvía un niño pequeño, le gustaba, admitió en sus adentro y mientras una sonrisa de doncella enamorada cubría su rostro se sirvió un vaso con agua, aunque este fuera un amor no correspondido nada decía que no podía disfrutarlo en silencio ¿verdad?

- ¡también quiero! -hablo Percival parado frente a ella.

Se sorprendió un poco por no haberlo notado antes-claro, ya te sirvo-dejo el vaso a medias y fue por otro.

-no te molestes-le dijo con un ademan de mano-con esto me basta-tomo el vaso de Nasiens y se lo termino de un trago- ¡uf! Gracias Nasiens-.

Lo vio regresar corriendo sin preocupación alguna al lado de Donny-era mío-murmuro bajo con el rostro colorado. No tenía caso decir nada, suspiro cansada y dejo todo en su lugar antes de unirse a los chicos en el sofá de la pequeña sala, se sentó en el extremo contrario al de Donny y Percival quedaba justo al medio.

- ¿hay agua para Percival, pero no para mí? -pregunto Donny cuando la vio llegar.

-técnicamente yo no le di - corrigió aun sonrojada.

- ¡es mi turno para ver mi serie! -anuncio Percival adueñándose del control.

-da igual, siempre que no sean tonterías románticas-.

-bien por mi-respondió Nasiens mientras dejaba su sombrero en la mesita del centro. Percival coloco su programa, les recordó en que capitulo estaban y dio un breve resumen de la batalla que se estaba desarrollando, era lindo verlo tan emocionado.