Capitulo 14

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El día había sido realmente agotador, estaba terminando de limpiar la clínica siendo la última persona en salir, Violet había insistido en quedarse pero era demasiado tarde, ella tenía una familia que la esperaba en casa así que decidió no entretenerla más.

Se tomo unos momentos para ver por la ventana, las estrellas se alzaban en el cielo demostrando lo tarde que era, se había pasado algunas horas de su hora de salida pero había sido necesario, debía resguardar bien la información de los jinetes una vez tomada, no eran simples expedientes como los de los demás, suspiro cansada, el lado bueno es que había podido aliviar un poco la carga de su maestro al hacerse cargo de esos cuatro revoltosos pensó con una sonrisa en el rostro.

Termino de limpiar y apago las luces, fue hasta su lugar y se colocó su sombrero y bolsa antes de salir y cerrar con llave, el clima fresco la recibió afuera.

- ¿vamos juntos a casa? -.

No pudo ocultar su sorpresa cuando vio al caballero sentado fuera de la clínica - ¿Qué haces aquí Percival? – pregunto confundida, los había despachado hacia algunas horas a todos.

- Te espere para volver juntos – respondió en tono infantil.

- Debiste esperar mucho – comento aun sorprendida - ¿Por qué no volviste antes? No tengo problemas para regresar sola -.

Percival salto del lugar donde esperaba y aterrizo frente al rostro de la castaña haciéndola retroceder un poco – quería acompañarte, eso es todo – hablo viéndola fijamente.

Nasiens sentía su corazón latir con fuerza por la cercanía – gra, gracias... - respondió desviando la vista.

La sonrisa de Percival se ensancho y tomo la mano de la muchacha emprendiendo la marcha - ¿pasamos por algo de comer? – pregunto sin dejar de ver al frente.

Nasiens veía como su mano termino entrelazada con la del caballero, últimamente Percival parecía más cómodo haciéndolo cada que podía, una pequeña sonrisa se posó en sus labios correspondiendo al agarre – me apetece algo del supermercado – respondió caminando al ritmo de Percival, disfrutaría cada pequeño momento, pronto probaría el prototipo de su veneno.

- Buena idea ¡me apetece cocinar! ¿Qué dices? -.

- Me encantaría – acepto con una sonrisa - ¿Qué te gustaría comer? – trato de mantener la conversación mientras se dirigían a su destino.

- Que elija Nasiens -.

- Mis elecciones son aburridas – acepto apenada – elije tú, estaré bien con cualquier cosa -.

Percival apretó más el agarre y la acerco un poco más – ensalada de frutas y pollo no es aburrido – comento de forma maliciosa cerca del rostro de la castaña.

Nasiens solo desvió la vista y oculto su rostro bajo el sombrero sin decir nada, el sonrojo de la vergüenza hizo reír a Percival, era curioso como su ascendencia Hada-Gigante le provocaba gusto por estas combinaciones entre frutos y carnes.

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El viaje al supermercado resulto ser entretenido, ver a Percival corretear de aquí a allá fue divertido ¡Mira Nasiens! ¡un pollo gigante! Había gritado mientras sostenía una bandeja con un enorme pollo congelado, solo pudo reír desde el área de frutas y verduras mientras veía como un encargado le pedía que se callara, Percival le había encargado escoger las frutas y verduras que utilizaría para la ensalada de pollo que pensaba preparar, tu siempre eliges los mejores y más frescos ingredientes le comento cuando le encomendó la tarea, no pudo evitar sonrojarse un poco al recordarlo, era un comentario simple pero no demeritaba que fuese un elogio hacia su persona.

¿Puedo Tocarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora