REEMPLAZANDO EL PASADO

CAPITULO 17

Wei Ying estaba visiblemente agotado —Debemos prepararnos— dijo con voz tensa —Vimos algunos monstruos dirigiéndose hacia Lotus Pier. Aniquilamos algunos, pero no sabemos cuántos más estarán en camino.

Jiang Fengmian y Madam Yu se miraron con preocupación. "El líder Nie también mencionó monstruos que estaban apareciendo de la nada," pensó Jiang Fengmian. —Entiendo, iré con un grupo de discípulos para verificar. Mientras tanto, descansa. Ya preparamos tu habitación y también para los discípulos que vinieron contigo.

Wei Ying se sobresaltó y alzó la voz —¿Acaso no me escuchaste? Los monstruos vienen hacia aquí. Debemos evacuar. Pasará lo mismo que en Gusu. Dijeron que todo estaría bien si se encargaban, pero todo se volvió un caos— gritó alterado.

—Wei Ying, tranquilízate— dijo Madam Yu un poco cansada —Estás alterado por lo que pasó en Gusu. Ve a descansar. Hoy fue un día muy duro, no solo para ti, también para nosotros. Fengmian irá a investigar qué es lo que está pasando mientras tanto.

—Pero...

—Pero nada, Wei Ying. Ve a darte un baño caliente. Enviaré que cocinen algo ligero para ti— y ordenó a uno de los discípulos —Encárgate de que siga mis órdenes.

El discípulo asintió al instante y se llevó a Wei Ying hacia su habitación.

Una vez que se alejaron, Jiang Fengmian miró a su esposa —Mi señora, ¿crees que lo de los monstruos sea una coincidencia? El líder Nie también dijo que habían monstruos que perturbaron la ciudad.

Madam Yu suspiró, su rostro reflejando la preocupación que sentía —Espero sea solo una coincidencia, pero debemos estar preparados para cualquier ataque, Qinghe y Gusu están siendo atacados, no sabemos qué sectas más están siendo atacadas.

Jiang Fengmian salió con un grupo de discípulos a las afueras de Yunmeng para investigar. Mientras tanto, Madam Yu ordenó a los discípulos estar en alerta máxima ante cualquier incidente. También dio instrucciones para que niños, mujeres y ancianos se refugiaran dentro de la mansión Jiang, asegurándose de que todos estuvieran a salvo.

Después de dar instrucciones a los discípulos, Madam Yu se dirigió a la habitación de Wei Ying para ver si ya estaba más calmado. Sin embargo, aún estaba alterado por lo que le podría pasar a Lan Wangji, su esposo.

Madam Yu se acercó y le habló con suavidad. —Todo estará bien, Wei Ying. Tu esposo es un cultivador poderoso. De seguro ya derrotó a los monstruos y está de camino aquí para llevarte de nuevo junto a él.

Las palabras de Madam Yu lograron calmar un poco a Wei Ying. A pesar de eso, ella notó cómo mantenía su vientre cubierto todo el tiempo con sus manos —Estoy segura de que vendrá por ti y el hijo que esperas — añadió Madam Yu con suavidad.

—Quiero que venga ya— susurró Wei Ying, sus ojos llenos de preocupación —Lo extraño tanto.

Madam Yu lo abrazó con calidez —Tranquilo, Wei Ying, el bebé es sensible al dolor que sientes, podría hacerle daño, debes ser fuerte por él.

Wei Ying asintió, pero aun así se sentía ansioso. Madam Yu comenzó a acariciar su cabello con suavidad, susurrando palabras de consuelo hasta que finalmente Wei Ying se durmió.

Después de asegurarse de que Wei Ying se durmiera, Madam Yu salió a patrullar los alrededores de Lotus Pier, aprovechando para preguntar si su esposo ya había regresado. Los discípulos le informaron que Jiang Fengmian aún no había vuelto, lo que aumentó su preocupación. No obstante, sabía que debía mantener la calma y la fortaleza por el bien de todos.