Capítulo 4

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3 días después del Ataque a Gleiwitz
Imperio Médano
Provincia de Valtr
Ciudad Capital de Arene
Plaza Central de Arene
Hora 9:00 PM
Año 950

YARA

—Aún sigo sin entender, porque coño quieren ejecutarme— hablo con Ferrer que está conmigo en una celda.

—Ya te lo dije, quieren mantener la magia como algo que solo puede tener la esfera alta de la sociedad— dice acostada en la tabla de madera que sirve como cama supuestamente.

—O sea si pero es necesario ejecutarme, no pueden dejarme ir a mi pueblo y ya— me quejo.

—Posiblemente pero todavía tendrías la magia y eso sería un gran problema— dice acomodandose en la cama.

—Y encima el intento de fuga salió mal y también te ejecutarán por eso— le digo sentándome en mi cama de madera.

—Tenía que intentarlo niña, esto es bastante injusto para ti y para la magia, soy partidaria de que la magia debería ser universal pero solo se obtiene a través de la herencia y la única herencia de magia es la alta sociedad— dice mirando el techo.

—Igual, dentro de poco llegará la hora de la ejecución, yo por poseer magia siendo plebeya y tu por supuesta "traición a la patria"— le digo viéndola acostada.

—Yo me cago en esta cosa que nos pusieron, maldita ciencia eres buena para algunas cosas pero para otras quiero destruirte a base de golpe limpio— pateando contra la pared el dispositivo que teníamos en el pie y le da una descarga eléctrica.

—Si serás tonta, mejor disfruta los últimos minutos de vida que nos queda, hoy nos ejecutarán— le digo viéndola con el pie a acalambrado.

—Es verdad, y pensar que este es mi destino

—Bueno debemos aceptarlo, no es que podemos cambiar nuestro destino

—Lamentablemente tienes razón en lo que dices, tenemos unos minutos para despedirnos de nuestra familias antes de la ejecución.

—Algo bueno después de todo.

—Señoritas, llegó el momento, ¡En pie!— nos interrumpe dos guardias llegando a nuestra celda y buscando las llaves.

Ambas nos levantamos y salimos de la celda abierta por los guardias que nos encadenan las manos y pies.

Avanzamos a paso lento por el pasillo de la cárcel yendo hacia nuestro destino observadas por el resto dd reclusos que había presentes.

—¡Yara merece sus poderes dejenla viva!— grita uno de ellos.

La Chica de Valtr #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora