"Es Halloween...todo el mundo tiene derecho a un buen susto"—Brackett,Halloween.
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"Rose Granger amenaza a sus atacantes después de su secuestro"
"La mayor de los hijos del matrimonio Granger-Weasley revela su sufrimiento en estos últimos tres meses"
"Rose niega sus apellidos por vergüenza de ser secuestrada"
"Acepta que fue atacada aquella cena de este verano"
"Rose Granger-Weasley es vista con la ropa que el joven Malfoy compró: El romance del siglo"
"Rose Granger-Weasley expresa su deseo de venganza"
"La hija de la ministra de magia fue agredida, ¿Que nos espera a nosotros los simples mortales?"
"La Élite mágica se desestabiliza por una de sus princesas mágicas, por Rose, la rosa de la corona"
Una pequeña y malditamente sensual risa se escapó de los labios de aquel rubio que me roba suspiros quien leía con atención todas las blasfemias que aparecía por todos lados desde que se me ocurrió aquel irónico mensaje a todos los chismosos medios de la comunidad mágica de los cuales mis primos y yo nos tomamos la molestia de tomarles fotos y guardarlas en mi celular para el recuerdo.
—No importa cuantas veces lea todos estos artículos siempre me harán reír— ¿desde hace cuánto que aquel serio rubio se volvió tan risueño a mi lado? Y ¿porque tengo aquel maldito placer?
—Ríete de mis desgracias rubiecito.
—Siempre lo haré rojita, si no soy yo ¿Quién más podría?
—Alguien que no me gusta ¿tal vez? — dije bromeando, claro bromeando, antes de lanzarle una almohada.
La risa que salió de él fue tan malditamente y estúpidamente encantadora que si no hubiera estado ocupado en querer lanzarme la misma almohada me hubiera visto con la sonrisa más tonta que alguien puede imaginar.
Nos encontrábamos en una habitación del Caldero chorreante, una de las tantas que se había rentado para nuestro uso para prepararnos porque al final del día mis padres cumplieron su promesa por mentir en los testimonios y hoy 31 de octubre mis primos, mi hermano, ¿mi novio?... y yo estábamos explícitamente invitados a la cena del ministerio.
—Pero que linda sonrisa cariño, siempre me dedicas las más dulces y encantadoras sonrisas— maldito, se dio cuenta pero la forma en la que lo dijo y en cómo se me acerco me hizo suspirar inconsciente de mi acción.
—Rojita, y si ¿nos quedamos aquí? Podemos ver las películas muggles que tanto te gustan, podemos ver la de ese señor millonario y egocéntrico que te gusta, ¿Como se llama? ¿Tony Estrella?
Reí tomando su mano entre las mías mirando sus anillos, tenía muchos, todos de diseños de serpientes, todos menos uno, el del dedo anular tenía una pequeña rosa.
¿A caso me quiere matar con sus encantos?
Lo está consiguiendo.
— Tony Stark, no estrella y no podemos Scorp, tenemos que encontrar esa profecía.
El escuchar cómo se le escapa un suspiro pesado removió dentro mío algo que...incomoda, que me hace sentir...culpable.
—Te acabo de encontrar hace tan solo 5 días rojita, tu cuerpo aún está lastimado...
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Sin títulos ni apellidos.
Hayran KurguLa perfección es algo banal, pero toma importancia cuando las cámaras y la atención están en ti apenas naces, crecer conociendo que tus padres tomaron decisiones que te dejan la vara alta; los héroes de la guerra o un seguidor entre la filas del mal...