What Is Growing Up?

Starman

Nightlight entró de forma tranquila, pero segura al palacio de Arendelle, abrió las puertas con calma sin hacer mucho escándalo. Comenzó a caminar a paso regular mirando de un lado a otro en busca de Pitch, pero no había rastro de nadie, todo ahí permanecía en aparente calma. Cuando entró al salón del trono se lo topó al fin, él estaba sentado en el trono macabro que se había fabricado mirándolo con un rostro carente de emociones. Nightlight se sorprendió por eso y por su propia reacción, pensó que sentiría más, pero no sentía absolutamente nada.

–Tantos años sin vernos y honestamente me siento decepcionado– le dijo Nightlight –Pensé que en cuanto me vieras saltarías a arrancarme la cabeza o algo por el estilo– bromeó con un tono serio de voz.

Pitch se puso de pie con calma –Lo mismo pensé– suspiró –Sorprendentemente... no siento nada– comenzó a caminar lentamente hasta Nightlight.

–Es extraño, pareciera una eternidad en la que pasé soñando con este momento y es diferente... te ves diferente–

Nightlight se encogió de hombros sin tener una respuesta a eso –Lo mejor es dejar la charla para otro momento, creo que si vas a matarme preferiría saltarme la conversación de cortesía– el chico pensó en Jack –Solo me gustaría pedirte que...–

Pitch soltó una risa nasal –No quiero matarte Nightlight–

Los ojos del joven se abrieron con sorpresa mientras la semilla de la ira comenzaba a brotar con dicha revelación –¿Estas tratando de decirme que masacraste todo este pueblo y acabaste con casi todos mis amigos solo para nada?–

El ser se rascó la frente –Tenia que armar un teatro lo suficientemente convincente– dirigió su mirada al suelo –En realidad, no diría que todo esto fue para nada. Cuando despertaste algo en mí también lo hizo, he perdido el control de mi propio poder y cada vez me pierdo más en el–

Nightlight estaba confundido –¿Y desde cuando tener poder ha sido un problema para ti?, creí que volver a tus días de gloria era lo que más deseabas–

Pitch asintió –Normalmente lo sería... pero algo cambió– de su ropaje sacó un objeto, un relicario –Volví a encontrarme con aquello que pensé había perdido hace muchos siglos... mi corazón. Mi Emily–

Nightlight reconoció el relicario como el que una vez le perteneció a Madre Naturaleza.

Pitch inclinó su cabeza con vergüenza –Siento como cada vez se apoderan más de mí, pronto morirán las migajas que quedan de Kozmotis y ya no quiero lastimarla– se aproximó a Nightlight hasta estar frente a él –Por eso te necesito–

–No entiendo– antes de que Nightlight pudiera parpadear Pitch tomó su mano derecha y haciendo uso de su propia magia extrajo la daga que se encontraba oculta en su mano haciéndolo gritar de dolor.

Una vez estuvo afuera cayó al suelo junto con Nightlight –¿Recuerdas esto?– Pitch se colocó en cuclillas junto a Nightlight quien ejercía presión a su mano derecha para intentar frenar el sangrado.

El chico sudaba frio porque una ola de recuerdos enterrados llegó a él –...Ahora lo hago– jadeó por el dolor

–Aquella vez me salvaste... dijiste que podrías ayudarme– Pitch le entregó la daga llena de su propia sangre.

En cuanto Nightlight la tomó la observó con cuidado, era diferente a sus otras armas creadas, era de doble filo. Su empuñadura era dorada y formaba espirales, además de tener una incrustación de una piedra preciosa azul como el cielo; en cuanto a su acero, este era oscuro como la obsidiana y su filo era tan delicado que sentía que podría cortar hasta el aire. Esto era su esencia y la de Pitch Black mezcladas, esto era lo que los mantenía enlazados.

Nightlight dejó que su cabeza cayera en el piso frio, contempló el techo de la habitación rememorando todo en silencio. No pudo evitar soltar una carcajada que resonó por todo el lugar.

Pitch lo miró ofendido –¿De qué te ríes?– preguntó a un hilo de explotar.

–Sí, supongo que si prometí eso– suspiró –Planeaba que al deshacerme de mi cuerpo físico todas las restricciones que tenía éste se eliminarían y podría alcanzar un poder superior, uno que me permitiera poder ayudarte... y supongo que hubiera funcionado–

–¿Hubiera?– preguntó Pitch confundido.

Nightlight dirigió su mirada hacia el ser de piel grisácea y escamosa –Nunca contemplé que fuera a suceder lo que sucedió– respondió con seriedad.

–¿De que hablas?– Pitch lo tomó por los hombros levantándolo del suelo con brusquedad.

–Jackson Overland Frost– respondió con calma.

El labio superior de Pitch tembló al escuchar ese nombre. Azotó a Nightlight contra el suelo con ira antes de ponerse de pie –¡Jack Frost!– gritó con ira descargando su arena negra contra una de las paredes del palacio abriendo un enorme hueco en esta –¡Siempre Jack Frost!–

Volvió a tirarse junto a Nightlight –Niño, escúchame, tu sabes que cosas más importantes están en juego... Recuerda tu juramento– suplicó.

–Lo recuerdo todo el tiempo– asintió –Jack es un Guardian, prestó el mismo juramento y solo Manny puede liberarnos de éste–

–¡Maldita sea!– Pitch levantó su puño listo para golpearlo, pero antes de que pudiera hacerlo algo más lo golpeó a él en la cabeza.

–Te lo advertí, que la siguiente vez perderías la cabeza– Era Elsa quien lo había golpeado con su magia, a su lado estaba Katherine sosteniendo su espada, Kail entro al área seguido de los Snowies. Por el agujero entraron los trolls junto con Malvavisco, Bruni, Gale y Nokk, quien se había unido al grupo cuando pasaron por un cuerpo de agua y Elsa lo invocó.

Pitch se tocó la cabeza intentando recomponerse del golpe y se puso de pie –Morirán, ¡morirán todos!– gritó con odio creando un montón de pesadillas de diferentes formas que comenzaron a atacar al grupo de aliados. Todos jugaron su papel al combatir con estas.

–¡Nigthlight!– Katherine corrió al lado de su amor para ayudarle a ponerse de pie, pero se había desmayado, ella con cuidado apartó el cabello de su rostro –Elsa, mira esto– quedó sorprendida al ver lo que estaba sucediendo.

Elsa se apresuró a acercarse junto con Katherine. Quedó impactada al ver como el cuerpo de Nightlight se convertía y desconvertía en el de Jack. Dichas trasformaciones ocurrían en fracción de segundos, como si ambos se estuvieran fraccionando, hasta que finalmente uno regresó.

Jack se sentó de golpe buscando aire.

–Jack– Elsa no dudó en abalanzarse contra él para abrazarlo –Pensé que te había perdido–

Él tomó su rostro entre sus manos para mirar sus ojos cristalinos por las lágrimas que amenazaban con salir. Jack le sonrió con tristeza antes de besarla profundamente, pasó sus dedos por su cabellera platinada mientras estos resbalaban con facilidad. Respiró su dulce aroma y sintió la suavidad de sus labios antes de separarse de ella y mirar su rostro por ultima vez antes de girarse hacia donde estaba Pitch y lanzarse sobre éste con la daga en su mano.

–¡No!– Elsa y Katherine gritaron al mismo tiempo.