Capítulo 17 "Todo lo que sé, todo lo que quiero"

54 9 2
                                    

— ¿Contracciones? — interrogué.

— Sí, sí, rompí fuente hace horas. — respondía con dificultad. — por eso terminé consulta temprano. — Luciana suspiraba.

— ¿Qué?, ¿Pero qué haces aquí si rompiste fuente hace horas?

— Porque aún me falta dilatar, de nada sirve llegar al hospital y que solo me regresen a casa.

— Tranquila, tranquila, respira, te llevaré al hospital, ¿dónde está König?

— Está en el hospital acordonando la zona en la que estaré.

— Tiene las cosas planeadas entonces, tienes que llamarlo.

— No, ya viene para acá.

— De acuerdo, te llevaré entonces.

Tomé a Luciana y la alcé en el aire, salí por la puerta con dirección al estacionamiento, ella se sostenía de mi hombro con tanta fuerza que dolía, y se queja del dolor durante el camino, es por esa razón que camino lo más rápido que puedo.

— ¿Cómo es que trabajaste hoy así? — interrogué dentro del ascensor.

— El día fue ligero, tuve tiempo a solas así que caminé mucho por toda la oficina, con los niños en la casa me desconcentro. — ella permanecía con los ojos cerrados y respirando hondo.

— Comprendo.

— ¿Sabe Señor?

— ¿Sí?

— Después de esto cierro la fábrica. — la castaña se reía y luego interrumpía sus propias risas con quejas de dolor. — mierda, mierda.

— ¿Vas a esterilizarte?

— Sí, y König ya se hizo la vasectomía.

— ¿En serio?

— Sí...

— Bueno ya tienes una familia grande. — celebré.

— Gracias a Dios.

— Solo te falta un perro. 

— ¡No!, ¿un perro en la cas?, no, de ninguna manera — refutó con exageración, sus ojos se abrieron, yo me reía.

Subí a mi camioneta luego de acomodar a Luciana en el asiento de atrás a toda prisa, manejamos y justo al salir varios vehículos blindados nos interceptaron, por la oscuridad se me dificultaba ver, empuñé el armamento guardado dentro de mi chaqueta enlistándolo para accionar.

Del vehículo bajó alguien y se acercó al vidrio, así que lo bajé.

— ¡Price! — pronunció König sorprendido.

— Muchacho casi te meto una bala en la cabeza. — resoplé, él se reía.

— ¿Qué haces por aquí? — interrogó él.

— Fui a una consulta con Luciana.

— ¿Una consulta?, creo que estás muy grande para una consulta pediátrica o de neonatología.

— Después te cuento, ven aquí. — intervenía Luciana ordenándole.

König acudió, subió su capucha y acarició la nariz de Luciana para luego cargarla y trasladarla de vehículo, König caminaba hacia el asiento de piloto de la camioneta blindada, yo me quedé en el aire, él se detuvo y me observó.

— ¿Sabes dónde queda la clínica? 

— No. — respondí.

— Sígame, no te puedes perder el nacimiento de tu primera nieta. — él me daba pequeños golpes en el pecho.

Ocean: Price (SAGA COD #4)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora