EL BOSQUE DE MYSTVALE

Capítulo 31: Traición

Mientras contemplábamos el poder recién restaurado del anillo, algo captó nuestra atención: un antiguo escrito cubierto de polvo y telarañas, escondido en un rincón sombrío del templo.

Alaric se acercó al manuscrito con una mezcla de curiosidad y aprensión. "Esto no estaba aquí antes," comentó mientras deslizaba sus dedos sobre las páginas desgastadas por el tiempo.

Jake, Cass y yo nos acercamos para ver el escrito. Las palabras estaban en una lengua arcaica que Alaric comenzó a traducir con cuidado. La historia que contaba era más oscura y delirante de lo que esperábamos.

El eco de nuestras respiraciones y pasos resonaba en el antiguo templo mientras contemplábamos el escrito que Alaric acababa de descubrir. El texto arcaico revelaba la creación de la Sombra Roja por un guardián traidor, un hecho que se tornó aún más inquietante al considerar que todos los guardianes, salvo Alaric, habían muerto.

"Pero... todos los guardianes están muertos, excepto tú," dije, el peso de la revelación cayendo sobre mí. "No puede ser que desconfiemos de los guardianes que ya no están."

"Correcto," asintió Alaric, su rostro mostrando preocupación. "Los guardianes que están muertos no pueden ser los culpables. Pero lo que este texto sugiere es que la corrupción pudo haberse extendido más allá del guardián traidor original."

El silencio se hizo pesado. Si la corrupción podía extenderse, significaba que la amenaza era más compleja de lo que habíamos imaginado. La pregunta crucial ahora era quién podría estar detrás de la infiltración en nuestros esfuerzos.

Jake frunció el ceño. "Si no podemos desconfiar de los guardianes muertos, ¿Quién podría estar trayendo a personas como Greta y Abigail para espiarnos? ¿Cómo están obteniendo información sobre nosotros?"

"Esa es la pregunta clave" dijo Alaric, preocupado. "Las personas que parecen ser aliadas, pero que luego nos traicionan, podrían estar bajo la influencia de la Sombra Roja de alguna manera. Necesitamos considerar quién podría estar manipulando a estas personas."

Cass añadió: "Greta y Abigail han demostrado ser extremadamente astutas. Si han sido enviadas para espiarnos y sabotear nuestra misión, alguien más debe estar dirigiéndolas o controlándolas."

"Exactamente" asintió Alaric. "Hay una posibilidad de que haya una red de influencias y manipulaciones que no hemos detectado aún. Si logramos desentrañar quién está detrás de todo esto, podremos cortar las conexiones de la Sombra Roja y protegernos de futuros intentos de infiltración."

"Entonces, ¿Cómo podemos identificar a este manipulador?" pregunté, buscando una solución. "¿Cómo descubrimos quién está enviando a estas personas para espiarnos?"

Frustrado por las traiciones que habíamos sufrido anteriormente, decidí usar el anillo dorado para obtener respuestas de Dafne. Sentía una mezcla de rabia y desesperación por entender quién estaba detrás de nuestras desventuras.

"Es hora de que nos digas la verdad" dije, colocando el anillo dorado sobre Dafne. El anillo resplandeció, y una onda de luz envolvió a Dafne, forzándola a enfrentar la verdad sin posibilidad de mentir.

Dafne, aún debilitada, miró a través del resplandor y, con una mirada de resignación, empezó a hablar. "No hay mucho más que pueda decir" confesó con voz cansada. "El nombre que buscas es... Pletnius. Ese fue el hombre del que mi madre se enamoró."

El nombre resonó en la habitación como un trueno en un cielo despejado. Alaric, que había estado observando en silencio, se puso pálido. La revelación lo golpeó con una fuerza inesperada. "Pletnius... ¿mi hermano?"

Dafne asintió lentamente. "Sí. Él fue el guardián que portaba el anillo de las sombras. Mató a sus otros tres hermanos para robarles sus anillos. Sabía que eran los que más poder tenían, y junto a mi madre que lo transformó en un vampiro-fantasma, corrompió los anillos y ahora le pertenece a mi familia."

El rostro de Alaric mostró una mezcla de horror y comprensión. "Entonces... todo encaja. La Sombra Roja, los traidores, los ataques... ¡Pletnius fue el que estuvo detrás de todo!"

La revelación fue un golpe devastador para todos. Alaric se tambaleó, tratando de procesar la magnitud de la traición de su propio hermano. "Pero... ¿por qué? ¿Por qué querría destruir todo lo que representábamos?"

Dafne, aún bajo la influencia del anillo dorado, explicó. "Pletnius siempre deseó el poder absoluto. Creía que al corromper todos los anillos y fusionar la magia de las sombras con la de la luz, podría crear una fuerza invencible. Su objetivo era controlar Eternal y sumergirla en la oscuridad eterna, pero tú llevas todo este tiempo escondiéndote y ahora ya sabe dónde estás."

El grupo quedó en silencio, asimilando la magnitud de lo que habíamos aprendido. La traición de Pletnius no solo había sido una traición personal para Alaric, sino una amenaza existencial para todo Starfall y Mystvale.

"No tenemos tiempo que perder" dijo Alaric, con vozdecidida. "Debemos encontrar a Pletnius y detenerlo antes de que pueda ejecutarsus planes. El destino de estas ciudades está en nuestras manos."