A Contratiempo Del Corazón (Jungkook y Tú)

Capítulo 24: Ayudar a Jungkook

Taehyung me llevó a casa, volví a existir tranquila, luego de asegurarme de que todo fuera un sueño.

Sin embargo no dejaba de pensar en Jungkook. ¿Qué pasó luego de la fiesta? No pude ayudarlo con Yuna.

Así que tomé mi mochila y corrí a la heladería. Toqué la puerta y lo ví con una bolsa en la cabeza, un overol manchado junto a una camiseta.

Jk: Tn... ¿Qué haces aquí? —pasé a la heladería y noté que recién iba a continuar de pintar.

Tn: te prometí que iba a ayudarte... déjame cumplir mi promesa.

Jk: no voy a dejar que hagas esto, es muy cansador, créeme. Si quieres hazme plática.

Tn: no, quiero ayudarte, traje ropa vieja para que no importe si me mancho.

Jk: mm.. Bien —habló no muy convencido— puedes ir lijando las paredes y yo le pongo masilla.

Tn: bien... —agarré un poco de la lija.

Jk: ¿no deberías estar con tu novio?

Tn: hicimos un trato, terminaríamos el sábado, sólo fue una semana. —observé su rostro, noté un poco su sonrisa, la cual trataba de ocultar. Sonreí igualmente, me daba esperanza— ¿Qué hay de Yuna?

Jk: que horror, ni lo recuerdes. —reímos juntos.

Tn: a Taehyung no le agradas, no pensé que ibas a ir.

Jk: tenía...

Tn: ¿por los chicos?

Jk: por tí. —me miró a los ojos y dejé de lijar, se erizó todo mi cuerpo— Me asustó no encontrarte. Luego... abrí tu habitación —reía un poco y se puso serio— que mal, que irresponsable, te dormiste con la puerta cerrada pero sin llave. Tienes que tener más cuidado —comenzó a regañar serio— ¿Qué pasaba si no iba?¿por qué no te cuidas?

Tn: porque siempre estás ahí para protegerme. —susurré y se sonrojó al instante y se volteó rápido a continuar con vista a la pared.

Jk: sí, p-pero, por favor, cuídate más —habló más tranquilo.

No hubieron más palabras, continuamos con el trabajo tranquilamente hasta que se acercó a mí y comenzó a reír.

Jk: perdón, no lo noté.

Tn: ¿qué cosa? —me sujetó del antebrazo y agitó mi pelo, todo lo que lijaba me manchaba, pero que me limpie mientras tocaba mi piel era la mejor sensación de todas, él estaba enfocado en limpiar mi pelo, yo sólo me enfocaba en admirar su rostro como ver una obra de arte.

Se alejó y volvió con otra bolsa, seguidamente me acomodó recogiendo todo mi cabello mientras mi cuerpo gozaba de sentirse de esa manera.

Jk: ya está —bajó la mirada encontrando mis ojos que brillaban al verlo, me sonrojé al igual que él al verme. Bajé la mirada con una sonrisa triunfadora.

Tn: yo sigo con esto, avanzaremos mucho más rápido si tú vas pintando.

Jk: cierto...

Y así lo hicimos, él fue pintando. Estaba orgullosa de mi trabajo, la pared quedó como nueva, no había ningún hueco o malformación en el yeso.

Tn: creo que ya terminé con esta.

Jk: perfecto, sólo falta la otra pared y listo, luego la limpiada y terminamos, la verdad... agradezco tu visita y tu ayuda. ¿Puedes pasarme el balde pequeño de pintura? —preguntó sobre la escalera.

Tn: claro... —se lo pasé y le ayudé bajando el rodillo— lo haces ver fácil.

Jk: tal vez parezca, pero es más complejo, ya llevo días con dolor tremendo en los brazos. —reímos y luego de unos retoques bajó de la escalera— esto es diez veces mejor que el gimnasio. —reímos.