Capitulo 33

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- Juanjo significaaaa... corazón, en euskera.

Martin, el cual estaba entre los brazos del maño levantó la mirada para mirarlo a los ojos, con semblante seguro y sincero .

- si?

- Juanjoa

- ¿Juanjoa es corazón?

Juanjo se separó unos centímetros del muchacho poniendo cara de ilusionado y de sorprendido. Aquella cara era demasiado tierna e irresistible para Martin, y no pudo resistirse, comenzó a reírse en silencio escondiendo la mirada, le gustaba tomarle el pelo, además le debía algún que otro pique que le había provocado delante de sus padres.

- Gilipollas

El maño se terminó de separar de él mirándole con indignación .

- Va no seas picón

- con que esas tenemos...

- venga, era una bromaaaaa

Cómo Juanjo se había ido separando de su chico, dando pequeños pasos hacia atrás, a este no le quedó otra que correr hacia él, dando un pequeño salto enganchándose de su cuello. El mayor tuvo que agarrarlo por las piernas para que no cayeran ambos de culo.

- Ya tramare mi venganza- le susurró Juanjo al oído

Esas palabras hicieron que el vello de Martín se erizara de un escalofrío, no entendía cómo aquellas palabras le podían sonar tan sexis.

Aprovechando el desconcierto del vasco, Juanjo hizo que sus labios se unieran dándole un beso lento, suave, haciendo que Martin bajara sus piernas al suelo en un intento de no convertirse en gelatina líquida. Lo que no esperaba es que antes de separarse, Juanjo agarrara su labio inferior entre sus dientes y diese un pequeño jalón.

Sabía lo que aquel gesto le hacía sentir, y en ese momento estaba odiándolo muchísimo, ya que su prima los miraba a pocos metros en el coche, esperando a que terminarán de despedirse para volver a Zaragoza.

- Eres muy cabrón, ya te has cogido la revancha.

Martin le dio un manotazo acompañado de un pequeño empujoncito separándolo de él.

- esa bocaaasa.

- Venga vete ya o voy a terminar secuestrándote.

Al escucharle, Juanjo hace una mueca de tristeza mientras une su frente con la de Martin.

- Nos vemos pronto, ¿si?

- Claro, son solo unos días. ¿Va alguien a recogerte?

- Violeta, la llamé ayer para preguntarle antes de sacarme el billete.

Juanjo salía directamente de la estación de tren de Bilbao hacía Madrid, ya que su prima se iba a quedar con su novio unos días, y él tendrían ya que haber vuelto a la capital.

Juanjo le dio un pico rápido antes de separarse y salir corriendo hacia el coche, no sin mirar varias veces hacia el portal en el que Martin seguía plantado de pie sin apartarle la mirada.

- Que monos sois- dijo su prima una vez Juanjo se subió al coche y aarancó el motor.

- Eres una fisgona

- ¿Hasta cuando voy a tener que tenérmelo callado?

- Hasta que vuelva a ir a Zaragoza y se lo cuente a mis padres.

Pase lo que pase tu y yo // JuantinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora