Capitulo 19

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Martin vio en su mirada temor, a la vez que deseo, por ello subió hacia sus labios y lo besó, sin soltar su miembro, siguió jugando con su glande moviendo su mano, y no tardó demasiado en escuchar un gemido que se escapó entre sus labios mientras que sentía como se vaciaba entre sus dedos sobre su abdomen.

Juanjo jadeaba intentando coger aire, mientras que Martin agarraba de la sabana y le limpiaba el abdomen a Juanjo, apoyado en unos de sus brazos aun sobre el chico. Su mirada se enfocó en la de Juanjo, no sabía descifrarla realmente. Llevó una de sus manos a su cara.

- ¿Qué te pasa? - dijo Martin en tono de voz suave- ¿Estás bien? ¿Hice algo mal?

- Nada...yo- Juanjo le apartó la mirada dejando caer su cara hacía un lado

- Eh, mírame- dijo Martin agarrándole el mentón y obligando a mirarle a los ojos de nuevo- puedes hablar conmigo.

- Es, la primera vez que estoy con un chico- dijo Juanjo haciendo que sus ojos miraran a otro lado, ya que Martin impedía que girara su cabeza- lo siento ... yo...

- Oye- dijo Martin moviendo su cabeza para que su mirada se volviera a cruzar- está bien, tranquilo.

Martin soltó su mentón y lo abrazó, con fuerzas, dejando caer su cabeza en su hombro, y acariciándole la espalda con las yemas de sus dedos. Agarró la colcha y tiró de ella tapándolos, para que no cogieran frio. Estuvieron así varios minutos, hasta que Juanjo se separó un poco, sin romper el abrazo, lo suficiente para que sus caras quedaran enfrentadas.

La experiencia en la vida había sido muy diferente para Martin. Él, desde temprana edad, era consciente de que le atraían los chicos, y en su familia era un tema que se había hablado con total normalidad. No había tenido quizás los tabúes que Juanjo al parecer tenía con su familia y amigos, escondiéndose detrás de alguien que realmente no es.

- Pensarás que soy un rarito de mierda- dice Juanjo levantando una ceja y volteando sus ojos.

- Que va, cuando te veo se me bloquea la mente, quedo totalmente anulado y paralizado- dijo Martin haciendo que sus dedos rozaran su pecho, haciendo caricias suaves.

Juanjo soltó una risa bajita descontrolada de nerviosismo, mientras volvía a clavar sus ojos en Martin. Llevo su mano con indecisión hacía el costado del vasco, haciendo que su mano rozara su piel mientras iba bajando hasta su cadera.

- No se si estaré a la altura de tus expectativas

Tras decir aquellas palabras, la mano de Juanjo se acercó a la entrepierna de Martin, haciendo que este arqueara la espalda mientras cerraba los ojos y soltaba un pequeño gemido sin control entre sus labios.

- Tu solo... déjate llevar- dijo Martin con problemas para vocalizar.

*****

El suave murmullo del amanecer empezaba a colarse por las ventanas del pequeño hotel en Andorra. La luz del sol, aún tímida, pintaba la habitación con tonos dorados y sombras alargadas. Entre las sábanas revueltas y el desorden propio de una noche agitada, Juanjo comenzó a despertarse lentamente. Los primeros instantes de consciencia fueron de una paz casi irreal, hasta que el peso de un brazo sobre su torso le recordó de inmediato dónde estaba y con quién.

Abrió los ojos despacio y se encontró con el rostro apacible de Martin, durmiendo profundamente a su lado. Por un momento, todo lo ocurrido la noche anterior volvió a su mente en una oleada de recuerdos intensos: la fiesta, la música que los envolvía, el calor de los cuerpos que bailaban al unísono, las risas compartidas y, finalmente, los besos robados en la penumbra. Habían terminado en esta habitación, sin poder apartar las manos el uno del otro, entregándose a la pasión que había estado burbujeando bajo la superficie desde el primer día que se conocieron.

Pase lo que pase tu y yo // JuantinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora