𓂀 ℚ𝕦é 𝕙𝕦𝕓𝕚𝕖𝕣𝕒 𝕤𝕚𝕕𝕠 𓂀

∆ 7 ∆

5 días enteros habían transcurrido desde el incidente de los príncipes. Moisés se batia entre la vida y la muerte, había mejoría pero sus ojos aún no se abrían, esto aumentaba el miedo en Nefertari de perderlo junto con la princesa Henutmire.

En ningún momento lo dejaba sólo, ella estaba con el, no lo abandonaría, incluso sus horas de sueño se reducían con la esperanza de verlo despertar y dejar esa cama.

- Moisés aquí estoy mi amor - susurró Nefertari al entrelazar sus manos, sus ojos se nublaban de lágrimas al no poder ver una sola señal de su amado. ¿Acaso este sería el fin?

- Nefertari - esa voz la hizo voltear de inmediato, ahí estaba Ramsés quien apenas llegaba al cuarto.
- Deberías ir a descansar, tu padre me ha dicho que no has dormido nada estos últimos días - dijo preocupado el hijo del rey.

- Descansaré hasta que Moisés deje está cama - desvío su mirada hacia el muchacho hebreo.

- A este paso te enfermaras - dijo una vez más el príncipe - Yo lo cuidaré - aseguró al acercar sus pasos al lecho de su mejor amigo, pero nuevamente negó con la cabeza, ella no se movería de ahí, estaba decidido.

- Todo esto es mi culpa - resoplo frustrado, ganándose la atención de la joven - si tan solo lo hubiera escuchado.... - había arrepentimiento en sus palabras pero no podía hacer nada, ya todo estaba hecho.

- Estoy segura que el te perdonará - dijo suavemente al crear una pequeña sonrisa.

- Eso espero... Moisés es como mi hermano, hemos compartido tantas aventuras juntos - dijo nostálgico al recordar la infancia - Pero no puedo negar que estoy enamorado de ti Nefertari.

Lo dicho provocó un gran silencio en los aposentos, no había ninguna respuesta, Nefertari solo lo veía como un amigo, su corazón estaba puesto en Moisés, su amado príncipe hebreo.

- Lo siento Ramsés pero yo amo a Moisés - dijo entre un suspiró sin apartar sus manos de su amado - Estoy enamorada de él desde pequeños - Sollozó.