Capítulo 1

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Había pasado una semana desde ese encuentro entre ambos seres de diferentes razas. Aunque fué breve ese momento, de alguna forma logró afectarlos de ambas partes. Principalmente a Sticks, quién no paraba de repetir la conversación que ella y Shadow tuvieron ese día.

— ¡Sticks! — Llamó Tails, un poco alarmado. Sacando a la denominada de sus pensamientos.

— ¿Ah? ¿Que pasa? — Preguntó bastante confundida.

— Pués que llevas horas mirando tú comida y no haz probado nada — Mencionó Knuckles, algo molesto porque la tejón no haya comido nada de la deliciosa hamburguesa de Meg burguer. Seguro ya estaba estropeada.

— Eso, y que tampoco haz echo algún comentario extraño sobre... Tus ocurrencias — Añadió Sonic.

La tejón resopló con un poco de desánimo, para bajar la mirada hasta la hamburguesa de una forma que resultaba extrañamente melancólica. No estaba en su mejor estado en esos momentos. De alguna forma, se sentía... Mal.

Sus amigos se observaron de reojo, para dirigirle una mirada genuinamente preocupada a su amiga la tejón. Amy, quién estaba al lado de su amiga, colocó su mano encima de su brazo, intentando darle un sentimiento reconfortante.

— Sticks... ¿Va todo bien?— Preguntó la eriza, observando de forma amable a los ojos zafiros de su amiga.

— Si, todo está bien — Mencionó, para seguido sonreírle ampliamente para intentar convencerla de mejor manera. Amy frunció el entrecejo, poco convencida. Sabía que su amiga estaba mintiendo, haber estudiado psicología la ayudaba en cierta parte a reconocer cuándo el ánimo de alguien estaba realmente mal o cuándo mentía sobre este.

En esos instantes, un montón de bagniks comenzaron a llegar de forma veloz a la aldea, iniciando un ataque. Destruyendo varios puestos y dañando algunos aldeanos.

El Eggmovile apareció en escena, con el doctor Eggman encima, cargando una enorme sonrisa algo presumida. El Team Sonic respondió de forma veloz, levantándose de la mesa de Meg burguer para contraatacar.

Amy, sacando su martillo se dirigió rápidamente a la tejón.

— Que sepas que esto no ha terminado, apenas termine la pelea tendremos una charla seria — Fué lo que aclaró, con tono maternal en su voz. De alguna forma, la tejón se sintió levemente intimidada.

Todos se dirigieron hacia el Dr. Eggman, para responder a su ataque diario. Aquella dosis que nunca faltaba todas las semanas.

El Team Sonic chocó sus puños con una brillante sonrisa en sus rostros. Habían ganado otra batalla contra Eggman, dejándolo humillado por su intento inútil de acabar con Sonic y sus amigos. Realmente patético, ¿No?

— ¡Eso fué increíble! — Tails comentó con gran alegría, elevando sus brazos de forma radiante.

— Muy bien echo, chicos. — Felicitó Sonic, sintiéndose orgulloso de su equipo.

— ¿Vieron cuándo Eggman salió corriendo al ver cómo destrocé su MegaBot con mis puños? ¡Ja! ¡Menudo cobarde! — El grandote chocó sus puños entre sí, alegrándose de su victoria.

— En realidad fuí yo quién lo destrozó — Aclaró Tails, cruzándose de brazos al ver cómo Knuckles le robaba la victoria.

— ¿Cómo estás tan seguro? — Atacó.

— Porque lo ataqué con un láser, duh

Ambos chicos comenzaron a discutir la victoria, la cuál se sabía de sobra que había sido Tails quién había destrozado a Mega Bot. Realmente no hay que ser expertos para ver eso. Pero digamos que Knuckles es un nível bajísimo de tontería.

𝐈𝐧 𝐘𝐨𝐮𝐫 𝐄𝐲𝐞𝐬 || Shadsticks AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora