𝐈𝐧 𝐘𝐨𝐮𝐫 𝐄𝐲𝐞𝐬 || Shadsticks AU

Capítulo 20

Antes de Sticks y antes de Shadow. Existieron dos personas que se amaron de la misma manera que ellos.

Él era un hombre simple, que parecía no tener nada de especial que hiciera maravillar a las personas. Era un mago que practicaba trucos de magia e iba dando shows en un enorme circo que recorría el mundo.

Un día, él y un gran amigo suyo iban en un globo de aire, pasando por la selva mientras comentaban y reían de cada una de sus ocurrencias. Hasta que de la nada, una furiosa tormenta hizo acto de presencia y el globo se vió destruido.

Terminaron aterrizando en el centro de la selva, en un lugar oculto que ningún explorador se había dignado a explorar.

Ambos amigos estuvieron los primeros días intentando reparar el globo o buscar comunicación con sus compañeros. Sin embargo, ninguna de las dos cosas dieron resultados.

Ellos, rendidos, decidieron desplazarse por el bosque en busca de algún lugar dónde refugiarse e intentar sobrevivir. Estuvieron caminando por dos días, hasta terminar por encontrar una aldea de tejones en el centro de aquél bosque.

Aquellos salvajes lo recibieron con cierto recelo, alejándose a su distancia cuando los vieron. Sin embargo, una tejón, la hija del jefe de la aldea, ella se acercó al par de amigos para brindarles su apoyo.

La tejón, llamada Sahira, les dió un techo en dónde quedarse. Les dió refugio, les dió hospitalidad.

Con el paso del tiempo, la tejón y aquél mago habían pasado muchísimo tiempo juntos. Ella le enseñaba a cazar al mago, mostrándole las maravillas de la naturaleza, mientras que él, le enseñaba los trucos de magia que él conocía, maravillando a la jóven que siempre sonreía con emoción cada que él le regalaba alguna flor.

Como era obvio por la obra del destino, ambos se enamoraron profundamente en aquél confín de la tierra.

Su amigo, sin embargo, no estuvo muy feliz con esto. Tampoco estaba feliz de estar en aquél lugar lleno de raros y personas atrasadas económicamente. Por lo tal, el hombre comenzó a trazar un plan para salir de allí, empezando por reparar el comunicador y buscar ayuda del exterior.

Después de meses de haber intentado buscar comunicación, finalmente recibió la tan esperada respuesta. Él mencionó en qué lugar estaban y sus coordenadas, implorando un rescate mientras decía que habían sido secuestrados por una manada de caníbales.

En tres días, un equipo de rescate llegó a la aldea, con armas suficientes para neutralizar al equipo. El jefe de la aldea atacó a uno de ellos, al final terminó por ser asesinado.

Varios de los tejones de aquella aldea fueron asesinados debido a que decían que debían protegerse. No estaban acostumbrados a ver helicópteros tan a menudo.

Su amigo intentó convencer al mago de que se fuera con el, de volver a la civilización y dejar esa maldita posilga. Pero el mago, se negó, él quería quedarse con aquella tejón sin importarle cuánto trabajo debía de pasar.

Su amigo se enojó, pero intentó ser comprensible. Al final se fué con los del helicóptero, volviendo a su hogar.

Sahira fué coronada como líder de la aldea, casándose con aquél hombre meses después.

Luego de varios años, la tejón y el mago dieron a luz a una niña. Una niña con ojos zafiros tan brillantes que dejaban ciego a quién los mirara fijamente.

El mago se enamoró de esa niña, de su hija. Amándola tanto como un padre ama a su hija. La crió, le enseñó trucos de magia y hasta le enseñó a hacer crecer una planta en un frasco.