¿𝑅𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎𝑠?... (𝐵𝑎𝑗𝑖 𝑥 𝑇/𝑛)

•°23°•

Obviamente esto no se lo esperaba.

¿Recibir una llamada de Mikey desesperado porque arrestaron a Pah? Esto... No supo cómo reaccionar.

Lo último que supo fue que Pachin apuñaló a Osanai, el cual interrumpió una reunión entre los comandantes y los capitanes de la tercera división.

La chica se encontraba sentada en los columpios del parque, su celular presionando sus labios suavemente. Su mente nublada entre los acontecimientos recientes tanto en la ToMan como en su núcleo familiar.

Todo daba vueltas.

Mikey supo que no era conveniente que ella asistiera a la junta de emergencia porque naturalmente se llevaba de sus emociones y no de la lógica, pero ella era una parte indispensable en la toma de decisiones.

Por esa misma razón, ninguno vió venir la reacción de la chica.

Estando en la reunión, se levantó se su asiento dispuesta a irse sin dar una explicación. No tenía nada que opinar al respecto.

Las miradas de todos se posaron en ella cuando tomó su abrigo que estaba doblado en el respaldo de la silla y se lo puso mientras evitaba la mirada de los comandantes.

—¿A dónde vas? -Ante el llamado de atención, solo se detuvo y contesto estando de espaldas. Mikey utilizaba ese tono muy pocas veces tratándose ella-

—No puedo hacer nada para que se pongan de acuerdo -Dijo en tono firme y sin bajar la cabeza. Su orgullo no le dejaba girarse a verlos y enfrentarlos- ¿Por qué debería quedarme?

—Shir, dí lo que piensas. -Mitsuya habló en un susurro, intentando que cambiara de opinión y volviera con los otros dos- Siempre sabes qué decir.

—No siempre, Mitsu. -Se negó a mirarlo, solo frunció el ceño y siguió caminando-

Hasta que sintió que alguien tomaba su mano, impidiéndole avanzar. Era Baji.

—¿En serio te irás? -Por la mirada que le dedicó, parecía estar suplicándole que se quedara, aunque sea un poco más- No puedes dejarnos.

—...-Ella lo miró de reojo, viendo la desesperación en sus ojos y el deseo de que se quedara e intentará que Mikey y Draken entraran en razón- No. Estuve cuando ToMan nació, pero si acaba de este modo, no cuenten conmigo. -Se soltó de su agarre y a paso firme se dirigió a la salida- Gracias por todo, chicos. -Dijo antes de salir del local, sin mirar atrás a sus amigos que intercambiaron miradas por la decisión que tomó.

Inesperadamente, Baji fué detrás de ella.

—No creo que debas ir. -Draken entendía cómo se sentía, pero justo ahora Koteshi no está en condiciones de hablar con nadie-

—Me importa un bledo lo que pienses, Draken. -No le hizo caso y caminó a paso lento detrás de ella-

—Shira no debió haber venido. -Opinó Mitsuya en el mismo tono tranquilo de siempre, aún observando la puerta por la que ambos salieron-

—¿Por qué lo dices?

—Porque ella tiene influencia en nosotros aunque no lo parezca, sobre todo en Baji. -Afirmó mirándolo con seriedad- Y verla marcharse, solo hace que me den ganas de irme también.

¿No es curioso que todos los miembros fundadores estuvieran en desacuerdo con la propuesta de ese tal Kisaki?

¿Coincidencia? No lo creo.

Keisuke se apresuró a ir a su casa lo más rápido posible, cuando llegó y tocó la puerta, quien le abrió fué Stella.

—Está en su habitación. -Apenas el chico entro, ella señaló a las escaleras. A juzgar por la forma en la que Shira había llegado a casa, algo había pasado- No ha salido desde que llegó.