(XXXI)

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Heeseung informó de su llegada y fue conducido a la habitación, ignoró el recuerdo de lo que había presenciado ahí antes, pero el rostro contantemente sonriente de Jake no estaba ayudando demasiado. 

― Ya, quita esa sonrisa, tuve suficiente de cursilerías por hoy. 

― ¿Qué te tiene de malas? Normalmente no eres tan gruñón. 

― Asuntos personales. 

― ¿Te enamoraste o qué? 

― ¿A qué te refieres? 

― Pareces Yeji cuando se negaba admitir que le gustaba Ryujin, pasaba de malas. 

― No estoy enamorado y no estoy en negación. 

― Acabas de negar dos veces, eso me parece negación. 

― Soy un brujo realmente ocupado ¿Cuándo tendría tiempo de enamorarme de alguien? 

― No lo sé, podría ser de un compañero de trabajo, alguien con quien compartas algún experimento privado, eso suena realmente romántico. 

― Claro que no. 

― Adiviné, sí estás enamorado de un compañero de trabajo. 

― No, para nada. 

― ¿Y cómo sucedió? 

― Jake. 

― Bien, no preguntaré, solo creo que deberías pensarlo, ni siquiera para un brujo el amor es algo imposible. 

― Para mí sí. 

― No lo creo, bueno, no insistiré, es asunto tuyo de todos modos. 

― Sunghoon me dijo que querías salir. 

― Claramente, soy un lobo, hyung, no importa si estoy enlazado a un vampiro, siempre voy a necesitar ese contacto con la tierra, cosa que no he podido hacer porque todo el jodido castillo me sobreprotege, estoy cansado de eso. 

― También debes extrañar el cambio ¿Verdad? 

― Sí, definitivamente. 

― Bien, creo que estás lo suficientemente bien como para salir, me alegra que quieras hacerlo, hablaré con Sunghoon y le explicaré todo, eso sí, no quiero que te exijas demasiado, podrías lastimarte o lastimar al bebé, tienes que ser cuidadoso. 

― Sí, entendido, gracias hyung. 

― Bueno, mi trabajo aquí está hecho, solo te adelanto que es muy probable que sea un niño, considéralo a la hora de elegir un nombre. 

― ¿De verdad? 

― Sí, es probable, cuando mi mentor te examine estaremos más seguros, yo tengo fallos. 

― No puedo creerlo, Heeseung tiene fallos. 

― Basta. 

― Ok, ok. 

― Bueno, me voy, te veo mañana. 

― Hasta mañana. 

Heeseung salió y reunió a todos los miembros de la familia real que pudo encontrar. 

― Jake saldrá al jardín, lo necesita. 

― No cambiará. 

― No, para nada, podría lastimarse, pero sí saldrá al jardín, necesita conectar con la tierra del lugar para estabilizarse. 

― Podría lastimarse. 

― Es un lobo, no hay mucho que pueda herirlo. 

― ¿Acaso perdiste la cabeza? 

― ¡Suficiente! Ustedes dos fueron mis alumnos, así que escuchen bien, ese chico necesita tomar aire fresco y ustedes harán lo que yo ordene ¿Se entendió? 

― Heeseung, muchacho, deberías calmarte. 

― Lo siento señor, siento haber perdido los estribos en su casa. 

― Bien, se hará como dices. 

Sunghoon sonrió como un niño emocionado y corrió a contarle a Jake. 

― ¿Qué crees que escuché? 

― ¿Qué es? No soy adivino. 

― Puedes salir, vamos, se liberó mi agenda porque mi hermano tuvo un impulso de querer asumir responsabilidades ¿No es genial? 

― Ajá, ese niño se está sobrecargando con el asunto de Riki. 

― Lo sé, pero no quiere escucharnos, nunca lo hace a menos cuando está así, cree que lo puede resolver solo, es más, cree que debe resolverlo solo. 

― ¿Y si hablas con él? O sea, de verdad hablar, no como una charla rápida. 

― Mnn, hablaré con él. 

― Bien, ahora vamos al jardín. 

Regreso | MOON TALES 5 | jakehoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora