Regreso | MOON TALES 5 | jakehoon

(VII)

Habían acordado verse temprano, muy temprano, pero Jungwon esperaba poder dormir siquiera un poco antes de que Jay entrara por su ventana. 

― Ellos ya sabían que vendrías ¿No podías solo usar la puerta? 

― Nah, es más rápido por la ventana. 

― O simplemente te gusta subirte a mi ventana. 

― Mnn, definitivamente, tienes un árbol muy tenebroso aquí que da directo a tu ventana, es asombroso. 

― Bien, pero llegaste una hora antes, te dije a las cuatro, no a las tres. 

― ¿Y eso qué? Una hora más, una hora menos ¿Realmente hace la diferencia? 

― Mnn, sí, la hace, quería dormir un rato, estuve trabajando toda la noche. 

― ¿De verdad? ¿Qué sucedió? 

― Sunghoon hyung se desmayó, supongo que sabes algo de esto. 

― ¿De qué hablas? 

― Jake hyung y Hoon hyung, me refiero a que hay algo con ellos y tú lo sabes ¿Verdad? 

― Bueno, sí, pero aún es asunto interno de la manada, muy pocos lo saben y yo lo sé porque llevé a Jake con los brujos cuando se salió de control, pero sí, lo sé. 

― Tienen un vínculo incompleto, lo sabes. 

― Lo sé. 

― Están en peligro, ambos. 

― Sí... 

― Pero no creíste necesario decirle eso a Hoon hyung. 

― Asunto interno, como dije, no puedo decir un carajo, se supone que no sé lo que ocurre, ni siquiera Jake lo sabe. 

― Bien, Hoon hyung se desmayó, está perdiendo el control, es raro, pero creo que se debe a Jake, deben hacerlo lo más pronto posible, pero si no tienen cuidado, ambos podrían terminar mal. 

― Tranquilo, estás perdiendo el control tú, no pienses en eso por un momento. 

― No me digas que me tranquilice, Hoon hyung es como un hermano para mí, no puedo simplemente no pensar en eso. 

― A ver, a ver, solo dije que te calmes para que tu magia también se calme, entiendo como te sientes, no quiero que a Jake le pase algo malo, pero de verdad debes calmarte, tus ojos están rojos. 

― ¿Rojos? 

― Ajá. 

― No te acerques, necesito sangre y podría atacarte. 

― Puedo manejarlo. 

― No es cierto, no intentes hacerme sentir mejor, solo aléjate y vuelve después o yo que sé. 

― Jungwon, por favor, déjame ayudarte

― No. 

― Ven aquí, muerde. 

― Hyung, no, yo no puedo hacer eso, si pierdo el control podría tomar demasiada sangre ―pero Jay seguía acercándose más y más, hasta que la espalda de Jungwon se encontró con una pared―. Jay hyung. 

― Muerde, puedo manejarlo. 

― Jay hyung. 

― Tranquilo, está bien ―Jay tomó a Jungwon por la nunca y expuso su cuello, los colmillos del menor se clavaron violentamente y el lobo sintió la pérdida de sangre―. ¿Ves? Sigo vivo.