ciega de amor

Capitulo 4, la boda

MIN YOONGI

-¿Por que no usas un traje de bodas?-pregunta su compañero Jimin.

-Nunca me veras utilizar un traje de novio- sonríe ampliamente- además la chica es ciega, solo espero que ese sea su único defecto.

-Es ciega pero te va a amarrar- se burla- el millonario Min Yoongi casado y fuera del radar de las solteronas.

Sus carcajadas son tan estrepitosas que sus ojos se cierran al reír involuntariamente.

Alguien llama a la puerta de la oficina por la que entra el señor Kim con su mirada fría y calculadora, el hombre que no se tienta el corazón por su hija, no es un hombre, es un canalla y lo que esta por hacer lo condenara.

Detrás de el una joven camina con pasos inseguros, luce un vestido sencillo de satín dándole un toque elegante, cabellera negra y ondulada que le llega a la cintura, piel tan pálida como la nieve y mejillas levemente sonrojadas, ojos del color de la miel con puntos blancos por su ceguera. 

Ella es hermosa, como una princesa. Blanca nieves y aun así el cuento se queda corto. Estoy seguro que muchas mujeres matarían por tener una pizca de su belleza, se nota que no toma el sol muy seguido, incluso es mas pálida que yo. 

Parece un cachorrito asustado, la inocencia en su mirada.....joder ¿Por qué me  ponen esta prueba a mi? estoy seguro de que yo soy el primer hombre en su vida, seguramente ella es aun virgen... yo podría tomarla.......MIERDA.....SOY UN MALDITO IMBECIL.... pero al fin de cuentas soy hombre y no puedo evitar tener una erección cuando....

-Bienvenido SR. Kim- jimin hace una reverencia pronunciada- por favor tome asiento.

El hombre se sienta en el sofá dejando a su hija parada sin si quiera dirigirle una mirada.

-Señorita- jimin la toma del codo sutilmente y la guía hasta el sofá para que pueda sentarse. Ella se sienta con la espalda derecha y con la frente en alto, como si no estuviera a punto de ser obligada a casarse con un desconocido.

-¿Y el juez?- pregunta el señor Kim con tono molesto- no me digas que te arrepentiste.

-Por su puesto que no padre-  Yoongi hace una reverencia de 90°- ya esta en camino y seguramente no tardara.

Ania fija su mirada en donde esta parado Yoongi, como si lo pudiera ver, como si lo estuviera analizando. El cuerpo del joven tiembla por unos instantes, su corazón se acelera, ninguna mujer lo había visto de esa manera ¿será por su condición?

-¿Acaso no tienes modales?- gruñe el señor kim- saluda a tu esposo.

Ania solo hace una leve inclinación de cabeza aun dirigiéndole su mirada penetrante.

Min Yoongi no sabe que decir, sabe que no hay palabras que valgan la pena cuando esta por cometer la mayor barbarie que nunca haya echo, sabe que ella esta aquí en contra de su voluntad y por primera vez se siente un poco avergonzado.

Min yoongi hace una reverencia dirigida hacia Ania, inclinándose lo mas que su espalda le permita, como a manera de disculpa, aunque ella no lo pueda ver.

-Espero que nos llevemos bien- se limita a decirle.

Por la puerta un hombre de baja estatura ingresa casi corriendo con un maletín y una capa azul que se ondea con sus movimientos.

-Disculpen la tardanza- hace una reverencia- Soy el Juez Lee, acabo de salir de los juzgados y el trafico estaba horrible.

-El tiempo vale oro, mi estimado juez- se queja el señor Kim- espero no perder mi vuelo por su demora.

-OH lo siento mucho en verdad- se limpia el sudor de su frente con la manga de su capa- pero iniciemos de una vez. No hagamos esperar a los novios ¿están listos? 

Por la cara de molestia del señor kim, el juez se apresura a sacar los documentos. 

-Bien- trata de recobrar el aire- por el poder que me confiere....

-Por favor vayamos al grano- se queja una vez mas- firmemos esos documentos.

El juez no puede disimular su cara de desconcierto, pero sabe que se encuentra parado frente a grandes figuras publicas. 

-Muy bien- saca los documentos del portafolio y una tinta de sello y pluma- Señor Min Yoongi, ¿se encuentra aquí en contra de su voluntad? ¿Hay alguna razón para detener este matrimonio?

-No- contesta rápidamente- estoy aquí por mi voluntad.

-Muy bien, señorita kim Ania,  ¿se encuentra aquí en contra de su voluntad? ¿hay alguna razón para detener este matrimonio?

La tensión se percibe en el aire, todas las miradas se encuentran fijas sobre ella, saben que si ella dice algo pueden meterlos en grandes problemas, esta es su oportunidad de escapar si así lo desea.

-No, estoy aquí por mi voluntad.

El señor Kim suelta el aire que estaba conteniendo, sonríe satisfecho por la decisión de su hija, sabe que ella no se atrevería a llevarle la contraria, no estando en su condición. 

-Muy bien, que firmen el acta  los testigos primero.

Jimin toma la pluma y coloca su firma, despues se la entrega al señor Kim sosteniéndola con ambas manos y haciendo una reverencia, el señor kim firma en segundos.

-Muy bien ahora los novios, deben colocar su firma y su sello de familia. 

Min yoongi firma el acta y del bolsillo de su pantalón extrae un sello pequeño, presiona sobre la tinta roja y sella el documento, en el turno de Ania le ayudan a colocar su pulgar con tinta roja pues así avala sus documentos, coloca el sello y el matrimonio esta hecho.

-Felicidades a los novios, pueden colocarse los anillos e intercambiar votos.- Sonríe el juez esperando el intercambio de alianzas.

-Aun no compramos anillos- murmura el señor kim con una carcajada- ya sabe como son los jóvenes de hoy en día que todo quieren apresurado.

-Ya decía yo que les urgía casarse-sonríe- entonces nos veremos en el registro del bebe.

Comienzan a bromear mientras el juez ordena sus documentos, abandonan la oficina y el señor kim ni si quiera se detiene para darle una ultima mirada a su hija.

La oficina se queda en silencio, las cosas están hechas y ya no hay vuelta atrás, ahora ambos han unido sus vidas.

-¿Puedo pasar?- pregunta un chico conocido- Mi nombre es...

-Hoseok- sonríe yoongi  al recordar los tiempos en la academia- ¿Qué te trae por aquí?

-Yo soy el guarda espaldas y cuidador de Ania- la mira de soslayo- bueno lo era. Bueno, es decir, el señor kim me contrato pero ahora el se va y ...

-¿Y tu quieres conservar tu trabajo?- sonríe yoongi, pues sabe que ha acertado.

Dirige su mirada hacia Ania, esto es mucho mejor de lo que esperaba, si contrata al chico no tendrá que preocuparse por andar de niñera, solo tiene que darle su libertad y una casa en donde vivir, como un cachorrito.

--Esta bien,  inicias mañana, te pagare el doble de lo que el señor kim te daba siempre y cuando no se metan en mis asuntos.

-Gracias- murmura Ania, dirigiéndole por primera vez la palabra- Hobi... Hoseok es lo único mas importante en mi vida, no te daré problemas si dejas que se quede conmigo.

-No te metas en mis asuntos y todo estará bien- sonríe- haz lo que te venga en gana, yo no soy un carcelero como tu padre.